Aranzadi pretende ampliar en un 20% los créditos blandos que España concede a Marruecos

El ministro de Industria, Claudio Aranzadi, y varios altos cargos de su departamento se desplazarán a Marruecos a primeros de septiembre con el fin de ampliar los créditos del Fondo de Ayuda al Desarrollo (FAD) que España tiene concedidos a aquel país, según fuentes de la Administración. Esos créditos, que en teoría expiran a finales de 1992, ascienden a 1,25.000 millones de pesetas, cantidad que se podría aumentar en cerca de 25.000 millones.

España y Marruecos firmaron en 1988 un protocolo de ayuda financiera en el que se contemplaba la concesión de créditos FAD (créditos blandos destinados a países en vías de desarrollo con el doble obejetivo de potenciar las exportaciones españolas y contribuir al desarrollo económico del país receptor) por valor de 125.000 millones de pesetas, cuya utilización debía expirar a finales de 1992.No obstante, las autoridades marroquíes tienen prácticamente agotado el montante de los créditos, por lo que en los últimos contactos entre españoles y marroquíes se ha acelerado el compromiso adquirido a finales del año pasado por el presidente del Gobierno, Felipe González, de revisar la concesión de créditos blandos.

El hecho de que los créditos FAD impliquen indirectamente la penetración de empresas españolas en los países a los que van destinados favorece la intención de algunas de ellas de participar en proyectos tan atractivos como el de la electrificación o la gasificación de Marruecos, por lo que la dele gación española prestará especial atención a los temas de Energía, Turismo y Comercio.

Plan de internacionalización

Por otra parte, el Ministerio de Industria, a través de la Secretaría de Estado de Comercio, está rematando el denominado plan de internacionalización, cuyo objetivo es fomentar la inversión española en el exterior, Para lograr este objetivo, el plan se divide dos partes: medidas fiscales y medidas comerciales.Dentro de las medidas de tipo fiscal, la más reseñable es incrementar la desgravación sobre el impuesto de sociedades por las inversiones destinadas al establecimiento de filiales en el exterior. Hasta el momento, la desgravación era de un 15% de la inversión global, siempre y cuando el conjunto de las desgravaciones aplicadas sobre el impuesto de sociedades no supere n el 25% de la cuota. La intención de la Secretaría de Estado de Comercio es elevar ese procentaje de desgravación por establecimiento de fillales, si bien aún no se ha determinado el nuevo porcentaje.

Este paquete de medidas fiscales se completará con la posibilidad de consolidar los resultados de las filiales extranjeras en el balance de la casa matriz. Teniendo en cuenta que los primeros años de funcionamiento de las filiales suelen arrojar resultados negativos, esta consolidación puede tener efectos positivos para la casa matriz a efectos fiscales. Además, Industria proyecta evitar las penalizaciones en la repatriación de dividendos.

Respecto a las medidas de tipo estrictamente comercial, el plan de internacionalizacion prevé ampliar las ayudas directas al establecimiento de filiales. En estos momentos hay 200 empresas que se benefician de estas ayudas, si bien las sólicitudes ascienden a 400.

Estas ayudas directas se apoyan en la gestión de Cofides, una empresa de capital riesgo participada por el Instituto de Comercio Exterior (ICEX), el Banco Exterior y el Instituto de Crédito Oficial (ICO).