El BBV negocia la venta de Espasa-Calpe

El Banco Bilbao Vizcaya (BBV) negocia en estos momentos la venta de su empresa editorial Espasa-Calpe con el grupo alemán Langheths y con una sociedad participada por los grupos Larousse y Planeta, las dos firmas que han presentado ofertas formales de compra tras las gestiones realizadas por la firma especializada Salomon Brothers, encargada por el banco.

El pasado 30 de junio finalizaba el plazo que se había propuesto el Banco Bilbao Vizcaya para la recepción de ofertas sobre la empresa editorial. En principio, en las actuales negociaciones se mantiene la puerta abierta a vender tanto el 30% del capital como se anunció en un primer momento o un porcentaje mayoritario. La valoración de la empresa es de 20.000 millones de pesetas, según los informes efectuados por las firmas asesoras. Esta cifra marca la referencia a la hora de establecer el precio del porcentaje que finalmente se venda y que ingresará el BBV.En principio, el BBV planteó la posibilidad de sacar a losmercados bursátiles el 30% del capital de la empresa que preside Ignacio Bayón para inyectar liquidez y abordar planes de expansión. Más tarde, e influido por las malas perspectivas de los mercados financieros por la crisis y la guerra del golfo Pérsico, se estudió la posibilidad de dar entrada a un socio europeo, y para ello se encargó un cuaderno de ventas a la firma Salomon Brothers.

Según han indicado fuentes de la entidad bancaria, la entrada en vigor del mercado único europeo obliga a contar con socios europeos que cuentan con una red de distribución que permita instalarse en mercados con grandes expectativas.

El grupo Langheths de Alemania, que controla la empresas Brookhaus y Tuden, es líder del mercado europeo en enciclopedias, diccionarios y guías de viajes, y ha presentado la oferta por Espasa-Calpe para controlar una parte del mercado español. La oferta que ha presentado la sociedad participada por el grupo francés Larousse y Planeta trata de consolidar la posición en el mercado español dentro de ese segmento del negocio editorial.

Espasa-Calpe obtuvo en 1990 un beneficio bruto de 1.320 millones de pesetas, con una facturación de 8.669 millones. En la carta que dirige el presidente de la empresa, Ignacio Bayón, a los accionistas señala: "Nuestra editorial está viviendo los últimos años de un mercado dominado por las estructuras de producción y consumo de ámbito nacional. La empresa mira un objetivo distinto, el europeo, Y necesario prepararse para competir en un mercado abierto. Este empeño obligará a nuevas inversiones y a estudiar la posición de la empresa en el nuevo mercado".