Los 'cinco grandes' abogan por un código de conducta para regir la venta de armas
Altos funcionarios de los cinco miembros permanentes del Consejo de Seguridad de la ONU iniciaron ayer en París una reunión sobre limitación de la venta de armamentos. Estos países -Estados Unidos, URSS, Francia, China y Reino Unido- son los principales exportadores mundiales de armas. Los cinco grandes dicen estar de acuerdo en la necesidad de establecer lo que llaman "un código de buena conducta" en el negocio de la muerte. El encuentro de París es su primera reunión al respecto desde la II Guerra Mundial.
Estados Unidos afirma que la guerra del Golfo ha probado que no puede suministrarse cierto tipo de armamento a cierto tipo de regímenes. Por ejemplo, no pueden venderse misiles de largo alcance a un líder como Sadam Husein, primer gran disidente del "nuevo orden internacional" propuesto por el presidente norteamericano, George Bush.En la concepción norteamericana, aceptada en principio por los otros participantes, el objetivo del "código de buena conducta" que ha comenzado a discutirse en París no es eliminar, ni tan siquiera reducir, el negocio de las armas, sino evitar que caigan en malas manos".
Algunos comentaristas franceses recuerdan que la guerra del golfo Pérsico también ha probado la incapacidad del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas para encontrar soluciones pacíficas a los conflictos de este planeta.
Y como forma para explicar este hecho subrayan que no es casual que los cinco miembros del Consejo de Seguridad con derecho a veto sean exactamente los mismos que los cinco grandes mercaderes mundiales de armamento.
Un dato parece dar razón a los desconfiados.
La crisis del Golfo ha sido agua de mayo para la industria francesa del armamento. En 1990, los pedidos internacionales de armas francesas se incrementaron un 67% en relación al año precedente, alcanzando la cifra de 33.400 millones de francos (alrededor de 600.000 millones de pesetas).
La mitad de esos encargos procedieron de Oriente Próximo y el Magreb, y muy particularmente de Arabia Saudí y los ricos países petroleros de la península Arábiga.
Dinamismo en la exportación
Hace un par de semanas, la primera ministra francesa, Edith Cresson, se declaró partidaria de una política de exportación de armas "más dinámica", y dijo estar trabajando para encontrarle al avión de combate, el cazabombardero Mirage 2000-5 nuevos mercados en Europa, Oriente Próximo y Asia.La primera ministra de Francia, Edith Cresson, recordó que, en efecto, el presidente François Mitterrand había propuesto días antes un plan mundial de desarme, pero explicó que ese plan pretende tan sólo establecer "unas mínimas reglas de disciplina internacional".
En realidad, el incremento de las ventas de armas francesas es modestísimo comparado con el norteamericano.
El aplastante éxito frente a Irak de los aviones de guerra y misiles de Estados Unidos ha disparado la demanda mundial de tales productos.
Sin embargo, Estados Unidos es el otro participante en el encuentro de París que tiene un plan de limitación de las exportaciones.
Propuesta francesa
La propuesta francesa, anunciada por Mitterrand el pasado 3 de junio, abarca todo el planeta.La norteamericana, presentada el pasado 29 de mayo, se limita a Oriente Próximo. Bush desea evitar la "proliferación" en esa región de armas de destrucción masiva y de los misiles que pueden transportarlas.
Tanto el plan francés como el norteamericano proponen crear mecanismos internacionales de consulta y de control, pero todo ello no deben, en cambio, afectar a los "intereses legítimos" de los Estados productores y de todos sus clientes.
Reginald Bartholomew, vicesecretario de Estado norteameriano (ex embajador de EEUU en España), y Víctor Kárpov, viceministro de Exteriores soviético, representan a sus países en la reunión parisiense, la primera de una serie sobre control de venta de armamentos que continuará la próxima semana en el marco del G-7, la reunión cumbre de los líderes de los siete países más industrializados que se celebrará en la capital británica, Londres.
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