Gracias, señor cardenal

Le doy las gracias, señor cardenal, por todo lo hecho por Toledo, por lo bien que se porta usted con esta capital desde hace ya no sé cuántos años que lleva en ella.Era yo un niño cuando llegó a la Ciudad Imperial. Vino precedido de una fama que entonces los toledanos no podíamos entender. Eran otros tiempos, pero en aquella época ya se habló de que le habían echado de Barcelona, que le habían quemado el coche y no sé cuántas otras cosas más, que por cierto no sé si serían verdad, pero como toledano no me importó, al igual que a casi todos los toledanos.

Siempre ha sido -por lo menos eso es lo que ha demostrado en su larga trayectoria por Toledo- un cardenal que quería pasar a la historia; pero a la historia se puede pasar por la puerta grande, haciendo el bien y respetando a los demás, o por la puerta chica, que creo que es como va a pasar usted haciendo lo que le da la gana y sin importarle un comino lo que opinen sus feligreses y, en general, el sentir de prácticamente todos los toledanos.

No hace falta remontarse mucho tiempo atrás, pero casi todos los años pasa para el Corpus. Tenía que dar la nota: cuando no impedía al ministro presidir la procesión, amenazaba con no sacarla y otras muchas barbaridades más que no es necesario comentar, pues están en el recuerdo de todos los toledanos.

Enhorabuena, ya ha conseguido pasar a la historia: se ha cargado de un plumazo 500 años de tradición de un pueblo que si tiene algo que le distingue de los demás es su hospitalidad hacia los extraños, extranjeros y visitantes de otras provincias o regiones no sólo de España, sino del mundo entero.

Me pregunto, don Marcelo, si se le hubiera ocurrido hacer esto en Barcelona, San Sebastián o Pamplona, por poner un ejemplo. Claro que no. Pero los toledanos aguantamos todo; aguantamos tanto que somos capaces de resignarnos con que nos quiten la fiesta mayor de Toledo, nuestro Corpus. Claro que la culpa no es sólo suya. ¿Dónde están las asociaciones de vecinos? ¿Dónde están los representantes del pueblo, llámense ayuntamientos, Junta de Comunidades, etcétera? ¿Dónde está el pueblo de Toledo, los toledanos?

Por favor, señor cardenal, pase usted a la historia por la puerta grande, todavía tiene tiempo, defendiendo la tradición de todo un pueblo que vibra con su fiesta mayor, y entonces sí le daremos las gracias, señor cardenal- Ángel Sotomayor.