Empresas de publicidad compran por 3,5 millones datos personales contenidos en el último padrón de Madrid

Algunas empresas dedicadas a la venta o publicidad por correo disponen ya de los datos personales de ciudadanos de Madrid contenidos "en el último padrón municipal [el de 1991]", y están siendo utilizados con fines comerciales, según reveló ayer a la cadena SER el gerente de una de las 150 empresas que se dedican en España a la mercadotecnia.Los datos del padrón, que están siendo vendidos a 3,5 millones de pesetas, siempre según la citada fuente, contienen los nombres, filiaciones y trabajos de los más de tres millones de madrileños, entre otras señas. La directora de una agencia de mailing confirmó que existe esa práctica y que hay empresas, no la suya, que trafican con el padrón e incluso con el censo.

Juan José Echevarría, vicepresidente del Centro Municipal de Informática (CMI) y concejal de Hacienda, aseguró ayer que abrirá una investigación para averiguar quién, en su caso, está detrás de la venta del padrón.

El gerente de la empresa de mercadotecnia que adquirió los datos comentó que luego completan tales ficheros con los teléfonos, retribuciones y qué tipo de vida llevan los clientes que consideran pueden beneficiarles. Cada dato del padrón es vendido a 10 pesetas.

Otras fuentes municipales dijeron ayer que les extrañaba que se esté traficando con los datos del último padrón, ya que "éste aún no está informatizado". Añadieron que el padrón es secreto; no así el censo, que se exhibe en cada campaña electoral y al que tienen acceso los partidos políticos que lo solicitan.

Los colegios profesionales, los bancos y los partidos son otras organizaciones que venden los ficheros de sus clientes o afiliados. Se calcula que las empresas de venta por correo disponen de unos 45 millones de fichas personales.

Tanto el alcalde, Agustín Rodríguez-Sahagún, como José María Álvarez del Manzano, primer teniente de alcalde, dijeron desconocer que desde el municipio se estén, filtrando datos de ese tipo. Coincidieron en que, de ser cierto, esa práctica es "fraudulenta" y "merece la apertura de un expediente".