Las galerías de Madrid vuelven lentamente a su ritmo habitual
Después de la recesión del mercado a principios de este año, las galerías de arte madrileñas han comenzado a superar el mal momento hasta casi recuperar en los últimos meses de la temporada, su ritmo habitual. El que parecía un imparable ascenso y crecimiento del mercado del arte en Madrid en los últimos anos, se vio resentido por la casi paralización de actividades a principios de 1991, con el único balón de oxígeno de la feria Arco, que aún así, resultó insuficiente.Sin embargo, se siguen abriendo nuevas galerías. Recientemente inauguró Nieves Fernández su nuevo espacio con una exposición de Alfonso Albacete. "El hecho de abrir una galería en Madrid es como el final de una trayectoria", explica; "es la continuidad de una labor que sigue con el concepto de galería que me interesa, y es el de dedicarme a jóvenes artistas, españoles y extranjeros".
Según ella, el mercado del arte en Madrid se ha depurado con la última crisis. "El mercado del arte en el extranjero está mal por otras razones", dice. "En España, y en Madrid en particular, ha sido beneficiosa la recesión porque hará que los que entraron en el mundo del arte con ánimo especulativo se dirijan hacia otro sector. A causa de ellos los precios del arte habían subido demasiado, de una forma irreal, y los coleccionistas mal orientados habían cometido muchos errores. Yo creo que lo principal en una galería es una buena relación con los artistas, y una dedicación especial hacia sus colecionistas".
Tirar la toalla
Mar Estrada tiene su galería en Madrid hace cerca de tres años, se dedica principalmente a artistas muy jóvenes, y sus clientes son también en su mayoría gente joven. "Parece que ahora el mercado va algo mejor que a principios de año", dice. "Este año ha sido tan malo, que es fácil que algunos hayan decidido tirar la toalla, sobre todo los que se lo toman como un negocio. Los que lo tomamos como una profesión, simplemente tratamos de aguantar el mal momento. Después de Arco me iba bastante mal, pero en el último mes hemos recuperado y es un alivio"."Es un enigma para mí cómo podemos subsistir tantas galerías en Madrid. Pero creo que cada una sobrevive con el círculo de coleccionistas que se va formando. Los precios del mercado secundario estaban muy inflados y era preciso aconsejar a los coleccionistas que, aunque se empeñaran en tener la obra de un artista, tal vez no fuera el mejor momento de comprarlo. Que también se puede vivir sin un cuadro de Barceló".
Eladio Fernández abrió su galería hace poco más de un año en Madrid. "De momento yo he podido sobrevivir porque los precios de mis artistas son muy bajos y trato de mantener un nivel de calidad", afirma, "sólo expongo a los que entran dentro de mi proyecto, con una obra analítica no efectista o deudora de las modas".
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