González confirma a Serra para mediar entre PSOE y Gobierno, pese a la crítica de Guerra

El presidente del Gobierno, Felipe González, desautorizó ayer implícitamente al vicesecretario general del PSOE, Alfonso Guerra, al afirmar que el número dos del Ejecutivo, Narcís Serra, le secundaba eficazmente en la tarea de coordinación que desarrolla entre el Gobierno y el partido. La declaración la realizó tan sólo dos días después de que Guerra minimizara el papel de Narcís Serra como coordinador. Asimismo, el presidente de la Junta de Andalucía, Manuel Chaves, dio ayer a Narcís Serra el trato propio de un auténtico interlocutor durante su primera visita oficial a Sevilla.

Sin la expresión de disgusto o de gravedad que marca a veces el rostro de González cuando la prensa aborda temas de política interior en conferencias con mandatarios extranjeros, el presidente -acompañado del canciller alemán Helmut Kohl- se prestó de buen agrado a responder a una pregunta sobre quién coordina entre el PSOE y el Ejecutivo concluyendo incluso su contestación con una broma. La víspera Guerra había restado importancia al papel que desempeña su sucesor en la vicepresidencia del Gobierno comparándolo veladamente con el que él jugó."Yo soy, obviamente, el responsable de la coordinación", empezó por precisar González, "porque soy al mismo tiempo secretario general y presidente del Gobierno (...)". Pero, añadió, "el vicepresidente del Gobierno me va a ayudar seriamente en todo el esfuerzo de coordinación que me compete y lo va a hacer con una gran eficacia". "El hecho de que se siente en la ejecutiva o no [a diferencia de su predecesor Serra no es miembro de ese órgano del PSOE]", prosiguió González, "no obstaculiza la tarea de estar en comunicación con la dirección [del PSOE] y esto además lo comparte también el vicesecretario general Alfonso Guerra" al que el presidente no quiso, sin embargo, dejar en mal lugar.

De ahí que añadiese: "Hay más miembros del Gobierno que se sientan en la ejecutiva y Alfonso Guerra responde (en sus declaraciones del martes) que no va a haber una sustitución del presidente del Gobierno en la coordinación con el partido". En definitiva, según González, el vicesecretario se limitó ese día a recalcar el carácter insustituible del jefe del Gobierno y del partido.

Tanto al principio como al final de su larga respuesta González resaltó que todo esto: "Me parecen realmente cosas de muy poca cuantía". "Pero mientras nos estemos preocupando de estas cosas probablemente, en los temas gordos, tendremos un poco más de libertad para responder o no tener que responder". "Por ejemplo", concluyó, "al tema de las angulas; pues sí, hemos cenado angulas ayer por la noche". En la cumbre hispano-alemana de Sevilla, González prometió a Kohl que la próxima vez que visitase España le invitaría a comer angulas y una periodista le acababa de preguntar si había cumplido su promesa.

Serra, en Sevilla

En Sevilla, Narcís Serra obtuvo ayer un pleno reconocimiento de su misión como coordinador del Gobierno y de éste con el PSOE por parte del presidente de la Junta de Andalucía, Manuel Chaves, informa Juan G. Ibáñez. Tras haber acompañado a Serra por el recinto de la Exposición Universal de 1992 y compartir un almuerzo con destacados dirigentes socialistas andaluces, la mayoría de ellos destacados guerristas, Chaves resaltó públicamente que la visita del vicepresidente "refleja una interlocución política que pretende ser permanente y que no es única pero sí importante".

Serra rehuyó ser quien confirmase que su tarea de coordinación se refiere también a las relaciones del Gobierno con el Partido Socialista -"el presidente ya ha sido suficientemente explícito, y eso me evita más comentarios", se escudó- pero Chaves no dudó en proclamarlo al explicar que ese era uno de los motivos del almuerzo con responsables del PSOE de Andalucía. El vicepresidente quiso mostrar con esta reunión su respaldo al guerrista Luis Yáñez como candidato a la alcaldía de Sevilla -"los ciudadanos deben de saber que tras cada candidato del PSOE están todos los socialistas", declaró posteriormente- y adoptar una actitud conciliadora con el guerrismo.

Además de declararse "muy ilusionado por el cargo" y citar como único lamento que "le faltan horas al día para trabajar más", Narcís Serra se mostró muy seguro de sí mismo y de la consolidación de su protagonismo. "La coordinación es algo que, como el movimiento, se demuestra andando. Yo creo, como el presidente del Gobierno, que ahora lo mejor es trabajar y no el seguir haciendo declaraciones", zanjó, ante la insistencia de los periodistas. Y acontinuación rechazó realizar cualquier comentario sobre la posible contradicción entre sus tesis, y las expuestas ayer de forma matizada por Felipe González, con las defendidas el pasado martes por Alfonso Guerra.

Serra recorrió ayer por la mañana las obras de la Expo 92 acompañado por Manuel Chaves; el comisario general, Manuel Olivencia y el consejero delegado de la Expo 92, Jacinto Pellón, entre otros, informa Lourdes Lucio. Asistentes a la reunión con Serra manifestaron que éste asumirá la coordinación entre las instituciones implicadas en las obras de la Expo, misión que hasta el pasado enero había realizado muy directamente su antecesor, Alfonso Guerra.