Las cartas de amor de Pertini serán expuestas en Calabria

Del fallecido Sandro Pertini, el presidente de la República más amado por la gente en este país, se conoce sobre todo su fuerza de espíritu, sus largos y terribles años de cárcel fascista, sus combates como partisano y sus catilinarias contra los partidos políticos incapaces de dialogar con la gente de la calle.Pero nadie conocía hasta ahora lo que una exposición va a presentar en la Universidad de Calabria: su parte más tierna, sus cartas de amor desde la cárcel.

Desde aquellas cárceles fascistas en las que pasó 13 años y de las que una vez logró escaparse, Pertini escribía cartas de amor a una joven farmacéutica de su pueblo de la que se había enamorado. Se llamaba Matilde Ferrari y él la llamaba amorosamente Mati. Le decía en una de las cartas expuestas: "A ti, Mati, todos mis pensamientos, más uno". Y en otra: "No te pongas triste, Mati mía, si no gozo de la última amnistía... Yo no pienso en los años de cárcel que aún me quedan, pienso sólo en ti. El amor no tiene derecho a hacernos sufrir en una espera tan larga".

La exposición de Calabria, arrancada a los archivos de la cárcel, muestra un Pertini inflexible frente al fascismo, ante cuyos gerifaltes confesaba: "Admito plenamente los delitos de los que se me acusa y asumo todas las responsabilidades", y al mismo tiempo un hijo y amante tiernísimo que sufría sobre todo por el sufrimiento de su madre y por no poder abrazar a su amada Mati. "Estamos convencidos de que la historia de los pequeños detalles de las cárceles de Pertini", ha dicho el catedrático Salvatore Carbone, creador de la exposición, "sirven mejor que ninguna otra cosa para revelar la veracidad del credo político y la autenticidad de vida de Pertini".