La minifalda y las monjas

En sus peleas con los redactores jefes, los fotógrafos de prensa no se cansan de repetir que tratándose de fotografías no hay más texto que la imagen y que, por norma, el contexto sólo genera confusión. Algo asi es lo que ha sucedido con la fotografía de José Luis Pérez, ganadora del premio Ortega y Gasset de periodismo, concedido el lunes pasado.La fotografía es impactante y rotunda. Desde la primera fila de un auditorio emergen, tras un remolino de hábitos de monja, dos piernas de meridiana y rotunda feminidad que se proyectan hacia el estrado presidencial donde se concentraba lo más granado de las instituciones toledanas: el cardenal primado, Marcelo González; el presidente de Castilla-La Mancha, José Bono (eterna duda: en estos tiempos que corren quién es preminente en Toledo, la cruz o la espada.), y el presidente de la Real Fundación Toledo, Gregorio Marañón. Se trataba del acto de presentación del libro Conventos toledanos, publicado por ediciones El Viso, del que es autora Balbina Martínez Caviró.

Hasta ahí el texto de la fotografía premiada, en la que por la composición diagonal de la misma, las piernas de la joven llegan a invadir el tercio superior de la imagen, situándose en la horizontal de los ojos de la monja que ocupa el primer plano. Las palabras del cardenal primado arremetiendo contra la campaña del Gobierno sobre el uso del preservativo no fueron pronunciadas en el contexto de la presentación del libro conventual sino posteriormente. Una equívoca redacción del pie de foto y de la noticia de prensa sobre las palabras del cardenal de Toledo indujeron, en su día, al error de unir ambas intervenciones cardenalicias. Lo que el error unió, quede desunido con esta aclaración.

Para la historia quedan la rotundidad de la foto premiada y las no menos rotundas palabras de monseñor González, al afirmar que "la campaña gubernamental para difundir ese pobre instrumental degradante [se refiere al preservativo] con el fin de evitar embarazos no deseados entre adolescentes españolas es terriblemente desgraciada". Aclaración final. Dado que el pie de foto publicado ayer en estas páginas hablaba de "la minifalda y las monjas", es justo precisar según observación del fotógrafo premiado que la joven no se cubría con minifalda sino con pantaloncito corto.