La comunidad asturiana calcula que hay 1.400 prostitutas en su región.
Los asturianos se gastan cada año en prostitutas 7.078 millones de pesetas, lo que representa el 50,6% del presupuesto de la Consejería de Sanidad del Gobierno autónomo para este año y el 0,7%, del producto interior bruto (PIB) de Asturias, según un informe de la Secretaría de la Mujer del Principado sobre Las condiciones de vida de las prostitutas de Asturias, hecho público en el transcurso de las jornadas que sobre prostitución femenina se clausuraron ayer en Gijón.
En Asturias ejercen actualmente la prostitución 1.400 mujeres, con una edad media de 29 años, y que perciben por su trabajo ingresos que oscilan, según los casos, entre las 60.000 pesetas y el millón de pesetas mensuales. El 71,4% de las prostitutas que operan en esta región tiene una media de 1,8 hijos, en el 69%, de los casos menores de 14 años. Más de la mitad de ellos (el 53%) no vive con su madre y el 15% de las prostitutas no visita nunca a sus hijos.Según dicho informe, realizado por el sociólogo catalán Ignaci Pons, sólo el 6,8% de las mujeres que se prostituyen en el Principado trabajan en la calle, y el resto ejerce en locales, establecimientos o en viviendas. Las condiciones de vida y de trabajo de estas mujeres son relativamente aceptables, según las conclusiones del estudio, aunque se aprecian anomalías sanitarias: un 10,41/0 de ellas consume heroína y el 95% asegura conocer a personas que padecen sida. Pese a ello, un 5%, prefiere no someterse a controles médicos y un 30% confía en no contagiarse. Aunque la mayoría de las profesionales utiliza anticonceptivos con sus clientes, un 32% no lo usa jamás con su pareja estable, lo que arroja un alto índice de embarazos y de abortos provocados.
Ignaci Pons, profesor del departamento de Metodología de Ciencias Sociales y Sociología de la Universidad de Barcelona y director del trabajo, afirma que la cifra de casi 8000 millones que mueve la prostitución en Asturías, que en principio parece muy elevada, es una estimación a la baja, con un margen de error, de un 5'Yo. Ana Bernardo, responsable de la Secretaría de la Mujer del Principado, se mostró sin embargo sorprendida por "la cifra tan elevada que factura el sector".
Abandono de la calle
Los datos, se obtuvieron mediante una encuesta realizada por un equipo de sociólogos, psicólogos y asistentes sociales, sobre una muestra representativa de 211 profesionales, a las que se interrogó por sus tarifas, número de servicios diarios y número de días que trabajan al mes, para obtener una medí a ponderada.Pons destacó que de las conclusiones, la que más le ha preocupado como sociólogo ,. y me ha llamado más la atención, es el porcentaje tan alto de hijos de prostitutas que no conviven con sus madres, atribuible tanto a la incompatibilidad de horarios como a la dificultad de estas mujeres para organizar su vida personal".Por su parte, Bernardo destacó de las conclusiones de este estudio," los cambios que se están operando en esta actividad, con un abandono progresivo de la calle que queda reservada prácticamente a las prostitutas marginales".
Bernarde añadió que le parecía preocupante "que sean los clientes quienes rechazan el uso del preservativo, y que las prostitutas tampoco lo utilicen con su pareja habitual".
El equipo que realizó el trabajo, se mostró sorprendido de la gran colaboración encontrada, tanto entre las prostitutas como entre los propietarios de los prostíbulos o clubes de alterne, "por lo que no es cierta esa imagen siniestra con que frecuentemente vemos esta actividad", añade Pons.
El informe concluye que un 74% de las mujeres dedicadas a esta actividad defiende la legalización de su profesión.
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