Japón y China reactivan sus relaciones, congeladas tras los sucesos de Tíananmen

Japón y China han entrado en la recta final para colocar de nuevo sus relaciones en el buen momento en que estaban antes del trágico episodio de Tiananmen, ocurrido hace casi dos años. El jefe del Gobierno japonés,, Toshiki Kaifu, tiene previsto hacer una visita oficial a Pekín este verano, y para prepararla viajó ayer a la capital china el ministro de Asuntos Exteriores, Taro Nakayarna.

El proceso de deshielo viene produciéndose desde hace ya. meses y refleja la gran preocupación que losjaponeses siempre sintieron de que el aislamiento internacíonal que produjo la represión del movimiento democrático tuviera un efecto demasiado negativo y repercutiera en la estabilidad de la región.Japón habría querido normalizar las relaciones poco tiempo después de Tiananmen, pero temió la crítica de las democracias occidentales. Kalfu, en la última cumbre de países industrializados de llouston (Tejas), se hizo el gran valedor de Pekín y sugirió conveniencia de que el Grupo de los Siete reanudara sin mias dilaciones la ayuda económica.

Desde entonces han viajado a China los ministros de Educación, Tesoro e Industria y Comercío Exterior japoneses.. El Gobierno de Kalfu decidió el pasado noviembre descongelar un paquete crediticio de 8 10.000 millones de yenes, suspendido a raíz de los sucesos de Tiananmen, qUe había sido aprebado durante la visita que el entonces primer ministro, Noboru Takeshita, efectuó a Pekín en el verano de 1988.

Noboru Takeshita, cuyo peso político dentro del gobernante Partido Liberal ha resurgido con fuerza últimamente tras el temporal ostracismo al que le llevó la dimisión por el escándalo de Recrult, volvió a Pekín hace escasos meses para entrevistarse con los principales dirigentes chinos.

El orden del día de las conversaciones que Nakayarna sestendrá con el primer ministri), Li Peng, su homólogo, Qlar Qichen, y otros altos funcionarlos incluye la agilización de los préstamos, el incremento del comercio bilateral (las exportaciones japonesas a Chirla descendieron el pasado año cerca de un 30%) y otros relacionados con la ccoperación entre los dos países y el desarme.