La generación de la Intifada cuestiona a la, OLP

La propuesta de Arafat de formar en Cisjordania y Gaza un Estado palestino desmilitarizado, comprendiendo, además, una zona de seguridad patrullada por cascos azules de la ONU, ha encabezado los boletines de la radio israelí, pero no ha provocado ninguna reacción oficial del Gobierno.Ya antes de la guerra del Golfo, Arafat era, a los Ojos de los dirigentes de Israel, una no persona, cuyos gestos y palabras ni siquiera eran dignos de un comentario. "Arafat es un hombre acabado", asegura un alto funcionario, "que lucha por la supervivencia política dentro de su organización y que se esfuerza por presentarse como de izquierdas o de derechas, según quién tenga a bien escucharle".

Arafat y la dirección actual de la Organización para la Liberación de Palestina (OLF') se ven cuestionados y contestados por parte de la intelectualidad nacionalista palestina en los territorios ocupados. El diario pro-OLP El Fajr, que se publica en Jerusalén Este, abrió el domingo una tribuna libre para que todos los palestinos puedan expresarse sobre las formas de lucha de nuestro pueblo en favor de la libertad y la paz", afirma Hanna Siniora, redactora en jefe del diario.

Un primer artículo propuso la disolución del actual Consejo Nacional Palestino Parlamento en el exilio- y una elección en la que los escaños fueran repartidos entre palestinos del interior (territorios ocupados) y del exterior. El nuevo Parlamento designaría un gobierno en el exilio, se declararía dispuesto a entablar negociaciones con Israel sobre la base de las resoluciones de la ONU y a comenzar discusiones con Jordania sobre la constitución de una confederación israelíjordano-palestina.

Este artículo abre una serie de unas cincuenta intervenciones previstas y tiene un especial peso en el debate palestino, ya que su autor es Radi Al Jaray, un intelectual palestino de 36 años que ha pasado trece en cárceles israelíes.

En un segundo artículo ayer lunes, Hanna Siniora recupera la idea de la disolución del Consejo Nacional Palestino de una reelección del Parlamento" en el que la nueva generacíón palestina que ha com batido en la Intifada esté ampliamente representada-.

Los palestinos de los territorios ocupados, que por la fuerza de los hechos conocen mucho mejor Israel y a los israelíes que sus hermanos en el exterior y que pagan directamente el precio de la lucha contra la ocupación, no quieren seguir ya la línea impuesta desde Tu nez. Es este un fenómeno nue vo, desconocido hasta ahora, cuya evolución merece una observación atenta.