Cuestión de fechas
En los últimos días han aparecido en la prensa diversas opiniones (hace días Raimon Obiols, el pasado día 5 Jordi Solé Tura en EL PAÍS) que nos parecen terroríficas, por venir precisamente de donde vienen, con el camuflaje de un socialismo humanista. Los socialistas catalanes han pretendido aparecer siempre como más modernos que sus compañeros de partido del resto del Estado, pero con la guerra del Golfo se han desenmascarado para siempre, hasta aparecer como vulgar es correveidiles.Como las cartas han de ser cortitas, no tenemos espacio suficiente para rebatirles punto por punto su demagogia de chicos con la lección bien aprendida, así que pasamos a decirles en unas líneas lo que requeriría muchas más.
Pretender convertir las manifestaciones en contra de la guerra en un apoyo a Sadam Husein es sucio y mezquino y pone de manifiesto la catadura moral y ética de quien lo manifiesta. Ustedes no pueden demostrar de ninguna de las maneras que los manifestantes por la paz lo eran a favor de Sadam Husein (incluso en el caso de que él así se lo atribuya); dudamos mucho que la mayoría de los manifestantes diera un duro por este sujeto, pero sí hubiéramos hecho todo lo posible por salvar y defender a los miles de ciudadanos civiles de Irak que fueron masacrados diariamente de forma criminal, y muchas de las veces desde nuestro país. Y esto sí que es un hecho claro y demostrado, y ustedes, señores Obiols, Solé Tura y tantos otros, han permitido que esto sucediera, lo defendieron a diario e intentaron desprestigiar con mentiras a los que nos opusimos a tal salvajada. Son ustedes los voceros de la guerra.-
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.