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Los nervios se tensan en Israel

La evacuación de los extranjeros ha generado un clima de inseguridad en el país

Todavía no hay pánico en Israel, pero el nerviosismo, el temor a lo desconocido, crecen día a día conforme se aproxima la fecha fatídica del 15 de enero. La decisión de la ONU y de numerosos embajadores de evacuar a las familias de sus diplomáticos, los consejos en ese sentido a los residentes extranjeros, han creado un clima de inseguridad que se ha contagiado a los israelíes.Cinco compañías aéreas han anunciado la suspensión de sus vuelos hacia Israel y la compañía nacional El Al ha tenido que cubrir el vacío. En el aeropuerto Ben Gurión, a unos 20 kilómetros de Tel Aviv, las filas de pasajeros en busca de billete aumentan y los súbditos alemanes son los más numerosos en las colas. Después de la recomendación de su embajada de abandonar el país, los alemanes, ciudadanos disciplinados, se van.

[La mayoría de los españoles radicados en Israel seguirán en ese país, pese a la tensión en la zona, e Iberia mantendrá sus vuelos, informó a la agencia Efe en Jerusalén el jefe de ventas de la compañía española. Fuentes diplomáticas españolas indicaron que ninguno de los funcionarios de la sede diplomática tiene previsto abandonar el país.]

También acuden a la terminal en busca de billete residentes estadounidenses, franceses, suecos, austriacos, belgas y algunos suizos. Matilde, una turista suiza de 23 años, con la cara bronceada y los cabellos rubios, lamenta tener que dejar "el sol y el mar azul de Israel". Descansa en Nethanya y tenía previsto continuar sus vacaciones en Eilath. Con un golpe de teléfono de sus padres todo terminó. "¿Estás loca? Vuelve enseguida".

Una pareja belga, de unos 50 anos y apariencia plácida, nos dice que "hoy mismo hemos terminado las vacaciones". También se van algunos israelíes y se llevan a su familia. Uno de ellos, con su esposa y dos hijos, afirma brevemente que se trata de "un viaje urgente de negocios". ¿Con toda la familia? "¿Por qué no? Es una ocasión para ellos de ver Suiza y esquiar. A continuación añade: "Por favor, nada de fotos ni nombres".

Algunos israelíes esperan el resultado del encuentro de mañana en Ginebra entre el secretario de Estado norteamericano, James Baker, y el ministro de Asuntos Exteriores de Irak para tomar la decisión de enviar o no a sus hijos al extranjero. "Sadam me pareció muy decidido en su discurso a las Fuerzas Armadas. ¿Quién me asegura que los iraquíes van a esperar al ataque norteamericano para lanzarnos sus misiles?", dice mi peluquero.

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Menos riesgos

El Ministerio de Defensa ha asegurado a la población que los misiles iraquíes con cabeza química no son precisos y que su carga ha sido reducida para poder alcanzar Israel, a 650 kilómetros de distancia, con lo cual los riesgos se reducen. Esta precisión tranquiliza a medias a la población. ¿Riesgos limitados? Quizá. Las posibilidades de que una bomba o un misil caiga sobre mi casa son estadísticamente limitadas, pero no tengo el 100% de garantías de que no sea así", dice el comerciante de tapices de mi calle.

Mientras tanto, el Ministerio de Defensa ha extendido la distribución de máscaras de gas a los pueblos y nuevos asentamientos. Hasta ahora únicamente las habían distribuido en las ciudades. Los corresponsales extranjeros, cada día más numerosos, tienen también derecho a su máscara.

Por su parte, el primer ministro israelí, Isaac Shamir, aseguró ante un grupo de 12 congresistas británicos que no atacará preventivamente a Irak, tal como, al parecer, prometió al presidente norteamericano George Bush, según la prensa israelí, informa la agencia Reuter.

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