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Los politólogos búlgaros toman la transición española como modelo

"Nuestra intención es la de informar al pueblo de Bulgaria sobre el camino original seguido por España a partir de 1975", destaca el politólogo búlgaro Ogman Shentov, director del Centro de Estudios para la Democracia (CED), un instituto de investigación política independiente con sede en Soria comprometido con la democratización búlgara. Shentov, que visitó España recientemente, muestra una atracción intensa por la transición política emprendida por España tras la muerte de Franco."La tolerancia, la elusión de la violencia y el talante de la transición española hacia la democratización es exactamente lo que Bulgaria necesita hoy como lección y como experiencia; porque lo que puede sucedernos allí es que se desate una caza de brujas por ambos bandos, ex comunistas y oposición, para averiguar quién es culpable de qué, tras todos estos años de régimen autoritario", añade el director del centro, que mantiene nexos entre numerosos políticos de todo el mundo.

Shentov, de 35 años, experto en Relaciones Internacionales por la Universidad de la capital búlgara, ha real izado desde el Centro de Estudi os para la Democracia sondeos previos y poselectorales de opinión pública pioneros en países del Este de Europa.

El éxito económico

Con John Kenneth Galbraith, Shentov considera que Japón y España "son los los dos modelos económicos de más éxito en la historia reciente". Y añade: "En Bulgaria existen condiciones para aplicar la experiencia española. Nosotros también somos un pueblo meridional, casi mediterráneo, en donde al igual que el fascismo en España, y a diferencia de otros modelos europeos, el estalinismo adoptó formas de opereta. Nuestras idiosincrasias nacionales son muy parecidas", añade.

"En Bulgaria interesa además el modelo económico español porque nuestra ética del trabajo, derivada de nuestro carácter nacional, presenta paralelismos evidentes con la española. No podemos copiar modelos como el alemán, donde esta ética es sustancialmente distinta".

"Lo importante para mí" subraya Shentov, "es introducir en Bulgaria la experiencia política y económica española que, por desgracia, se conoce aún muy poco allí. Algunos políticos e intelectuales búlgaros viajaron recientemente a EE UU y regresaron con el deseo de copiar aquél modelo. Tal pretensión no era realista y podría dar lugar a una nueva utopía. Por ello, el papel que ha jugado el Estado español para desarrollar la democracia, la educación y la cultura, me parece que se encuentra mucho más cerca de las tradiciones políticas y culturales de Bulgaria que cualquier otro modelo de acción estatal".

El científico búlgaro asegura que su país "es el único de los del Este europeo donde no existe un sentimiento antisoviético enraizado.

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