Contabilidad y auditoría
El Consejo de Ministros aprobó en su reunión de ayer el Plan General de Contabilidad que sustituye al de 1973. Se trata de un nuevo paso para las normalización contable y constituye el desarrollo de la legislación mercantil en materia de contabilidad. También se aprobó el reglamento de la ley de auditorías.
El Plan General de Contabilidad se estructura en una introducción y cinco partes. La primera es la que establece los nuevos principos contables. A continuación viene la codificación de cuentas de forma decimal. El real decreto que aprueba el plan contiene unas disposiciones transitorias que señalan los criterios contables para supuestos tales como arrendamiento financiero y fondos de pensiones.
Por su parte, el Reglamento de Auditoría de Cuentas regula el régimen jurídico profesional de los auditores de cuentas. El reglamente impone la obligatoriedad de prestar fianza en una cuantía de un 30% de los ingresos anuales del auditor de cuentas con un mínimo de 50 millones de pesetas que puede hacerse efectiva mediante un seguro de responsabilidad civil.
También se determina la información que los auditores de cuentas y sociedades de auditoría deben remitir al Instituto de Contabilidad y Auditoria de Cuentas.
Con este reglamento el Gobierno completa el marco normativo que regula el control externo de las cuentas anuales y se configura como una pieza más de la reforma de la legislación mercantil.
Dos disposiciones adicionales desarrollan la obligatoriedad de someter a auditoría las cuentas anuales de las entidades de seguros y cooperativas.
La norma regula el régimen jurídico profesional de los auditores en ejercientes, aquellos que prestan servicios por cuenta ajena, y no ejercientes.
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