Violentas y polémicas

El 6 de octubre de 1990, la cadena autonómica catalana TV-3 estrenó en su programación Teenage Mutant Ninja Turtles, la serie de animación norteamericana basada en los personajes de tebeo creados por Kevin Eastman y Peter Laird en 1983. Esta producción de dibujos animados ha sido adquirida en España por la Federación de Organismos de Radio y Televisión Autonómicos (FORTA). Poco después que TV-3, el 21 de octubre pasado, comenzó Telemadrid la emisión de la serie, que acapara la atención de un público infantil para el que las cuatro tortugas protagonistas son los supermanes de los años noventa. Para la fecha en que comenzó a emitir la serie Telemadrid, ya estaba en antena en TVG, ETB y Canal Sur, además de en TV-3.

La serie llegó a España acompañada de la polémica respecto a la violencia de algunos episodios. La Agrupación de Telespectadores y Radioyentes considera que la serie de Las tortugas Ninja "destila violencia". Los peligros que se suelen señalar en torno a este fenómeno son los derivados de la identificación del público infantil con estos seres marginales, acostumbrados a imponer el orden de modo drástico. Las cuatro tortugas mutantes llamadas Raphael, Michelangelo, Donatello y Leonardo, prescinden de las autoridades comúnmente reconocidas, como la policía, que aparece retratada en la serie como un cuerpo impotente para luchar contra la delincuencia y la corrupción.

Ciertos analistas del fenómeno explican la identificación de los adolescentes con estos mosqueteros que habitan en las cloacas con claves como el humor adolescente, su inofensivo descaro, iconoclastia y el hilarante batiburrillo que constituye la jerga particular de las mutantes.

El fenómeno Ninja, que en Estados Unidos generó sólo en 1989, según datos de la revista Newsweek, 250 millones de dólares de beneficios, ha llegado a España en forma de muñecos articulados, llaveros, insignias, camisetas y otros objetos.