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LA VISITA DEL LÍDER SOVIÉTICO

Improvisación y ajustes de última hora caracterizan los preparativos del viaje de Gorbachov a España

La improvisación está caracterizando, hasta el último momento, los preparativos de la visita que, entre el viernes y el domingo, realizará a España el presidente de la URSS, Mijaíl Gorbachov. Algunos detalles del programa oficial deben concretarse esta misma mañana, a 72 horas de la llegada a territorio español del líder soviético, y aún están en el aire importantes acuerdos que deberían firmarse durante su breve estancia en Madrid, entre ellos uno sobre cooperación financiera por el que España se compromete a prestar a la Unión Soviética 1.000 millones de dólares (casi 100.000 millones de pesetas).

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En medios gubernamentales españoles se atribuye a la parte soviética la incertidumbre que está rodeando los prolegómenos de la primera visita a España de un presidente de la URSS. A la escasa antelación con que Moscú comunicó las fechas de la visita, algo más de una semana, se ha sumado la lentitud de la Administración soviética en el proceso de consultas para concretar el programa. La difícil situación interna de su país ha llevado además a recortar la estancia de Gorbachov en España, que no se iniciará el jueves por la noche, como estaba inicialmente previsto, sino el viernes a mediodía. Ante esta situación, las autoridades españolas han tenido que ajustar su agenda: el Rey ha anticipado su regreso de Suramérica y Felipe González ha adelantado del viernes al miércoles su intervención en la campaña vasca.El Gobierno español ha demorado hasta esta misma tarde la difusión del programa oficial, para evitar que cambios de última hora le obliguen a rectificarlo públicamente. Con todo, ayer se daba por seguro que el líder soviético asistirá a una cena de gala en el Palacio Real, celebrará una conferencia de prensa con Felipe González en la Moncloa, visitará el Congreso de los Diputados y colocará una corona de flores ante el monumento a los muertos por España. Por el contrario, faltaba concretar en cuál de las universidades madrileñas que le han investido doctor honoris causa, la Autónoma y la Complutense, se celebrará el acto de investidura y se mantenía un margen de incertidumbre sobre su desplazamiento a Barcelona, que se consideraba "seguro en un 95%".

Estancia en Barcelona

Las declaraciones del presidente de la Generalitat, Jordi Pujol, en favor de la independencia de Lituania, el 26 de septiembre en el Parlamento catalán, están condicionando cl programa de Gorbachov en Barcelona. Pujol ha mostrado gran interés en verse con el recién nominado Premio Nobel de la Paz, hasta el punto de anular una visita a Trento (Italia), pero las preferencias soviéticas apuntan a su encuentro con un grupo de empresarios catalanes, que debe encajarse entre las entrevistas con el presidente de la Generalitat y con el alcalde de Barcelona, Pasqual Maragall, así como la visita al Anillo Olímpico, informa José Antich.

El diputado del PNV Iñaki Anasagasti presentó ayer en el Congreso una interpelación en la que se queja de la marginación de Euskadi en la visita de Gorbachov, informa Efe. Por su parte, un portavoz de Izquierda Unida dijo que el presidente soviético recibirá a Julio Anguita, pero admitió que aún no tenían día ni hora para la cita.

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La incógnita que rodea el programa de Gorbachov afecta también a los acuerdos a firmar durante su estancia en España. La treintena de documentos de que se habló en principio han quedado reducidos a una docena, ya que muchos no estarán listos para esas fechas, pese al acelerón dado a las negociaciones.

En el campo económico, se firmará un acuerdo sobre turismo y otro sobre promoción de inversiones, pero peligra el más importante, la apertura de una línea de crédito español por valor de mil millones de dólares (casi 100.000 millones de pesetas), debido a las discrepancias en torno a las condiciones del préstamo. Fuentes próximas a las negociaciones aseguran que es probable que finalmente no haya un acuerdo financiero, sino una declaración de intenciones que podría ser independiente o incluirse en la declaración política general que firmarán González y Gorbachov. Dicha declaración no contendrá previsiblemente novedades, aunque "lo importante", según medios diplomáticos españoles, "es que se produzca".

Tan secreto como el programa de Gorbachov ha sido hasta ahora el de su esposa Raísa, a quien probablemente acompañará como anfitriona la reina Sofía, ya que la visita del jefe del Estado soviético se produce a invitación del Rey. El matrimonio Gorbachov tiene previsto visitar el museo de El Prado y acudir a un concierto en Madrid.

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