El jefe militar de la URSS supedita la acción bélica al mandato de la ONU
El jefe del Estado Mayor del Ejército soviético, general Mijaíl Moiseyev, declaró ayer en Washington que cualquier uso de la fuerza en el golfo Pérsico "deberá contar con la aprobación de las Naciones Unidas" y que la solución del conflicto pasa por la "solución política".Moiseyev, que ha visitado EE UU tras aceptar una invitación del jefe de la Junta de Jefes de Estado Mayor estadounidense, general Colin Poweil, regresará a Moscú tras firmar un programa de intercambio militar con EE UU para los dos próximos años.
Durante su visita a EE UU, Moiseyev ha visitado instalaciones militares y centros culturales y se ha entrevistado con el presidente George Bush. Ayer, en una inusual rueda de prensa llevada a cabo en el Pentágono junto al general Powell, Moiseyev calificó de "muy positivo" el acercamiento político entre ambos países y los acuerdos preliminares alcanzados en el Tratado de Fuerzas Convencionales, que establece la destrucción de la mayor parte de los tanques y aviones soviéticos desplegados en los países del Este europeo.
Consejeros en Irak
Moiseyev declaró que entre los 206 consejeros soviéticos actualmente destinados en Irak hay "42 intérpretes" y que ninguno de ellos es "militar". El general dijo que Moscú no había retirado a esos consejeros de Irak porque son "una fuente de ingresos importante" para su país. El Pentágono había cifrado.entre 500 y 1.000 los técnicos y consejeros militares soviéticos destinados en Irak.
El jefe del Ejército soviético declaró que las sanciones económicas impuestas a Irak están "surtiendo efecto" y que no pensaba que se debiera utilizar la fuerza en el Golfo. El militar soviético añadió que la URSS contempla "la solución de una crisis como ésta a través del uso de las armas". En opinión del militar ruso, Sadam Husein está notando "el bloqueo económico y está comprendiendo lo lejos que ha ido y que se encuentra en una situación económica y política de aislamiento con la que no podrá sobrevivir por mucho tieinpo". El general Moiseyev también se refirió a los recientes encarcelamientos y deserciones registradas en el seno del Ejército iraquí como el síntoma de que la estructura militar de Husein comienza a sentir la crisis.
Estaba previsto que tras abandonar Washington, el general Moiseyev se dirigiera a La Habana, donde debía entrevistarse con los altos mandos del Ejército castrista. El general afirmó que "la situación económica actual de la URSS justifica que mi país intente encontrar un nuevo tipo de cooperación con Cuba y en esa zona del mundo".
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