La reconversión del CSIC en una sociedad estatal, apoyada por su presidente y el sociólogo Castells

La propuesta de convertir el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), el mayor organismo público de investigación, en una sociedad estatal será estudiada los días 19 y 20 de este mes por representantes de diversas entidades públicas y privadas. En los documentos preparatorios, a los que ha tenido acceso EL PAÍS, se afirma que el aplazamiento del proceso de adaptación de¡ CSIC a las tareas que tiene señaladas podría, considerarse una catástrofe.

La reunión ha sido convocada por el nuevo Instituto de Sociología de Nuevas Tecnologías, de la Universidad Autónoma de Madrid, dirigido por el sociólogo Manuel Castells. Se presenta como un seminario sobre Las perspectivas de futuro de los organismos públicos de investigación multisectoriales, con especial referencia al CSIC, que tendrá lugar en Miraflores (Madrid) los días 19 y 20 de octubre.Las tesis de debate del seminario señalan las ventajas que tiene en la actualidad la universidad frente al CSIC tanto en la agilidad de funcionamiento como por la incentivación económica del personal investigador. E ñ ellas se refleja la necesidad de un debate político como respuesta necesaria a "un problema de Estado, porque por tal debe entenderse la actual situación, que puede conducir a la desintegración interna, de una institución que, con sus defectos de funcionamiento, representa actualmente más del 30% del potencial científico nacional".

El CSIC cuenta actualmente con un centenar de institutos y 5.500 personas en plantilla. De éstas, 4.300 son funcionarios y 1.200 personal laboral. Entre los primeros, 2.000 son doctores investigadores y 1.800 personas se encuentran en formación. Según el documento, "plantear la uniformidad del CSIC con el funcionamiento de la Administración del Estado quizá sería tanto como proponer su liquidación". En la actualidad, los investigadores del CSIC han obtenido el acceso a las pruebas de evaluación y la subsiguiente subida salarial que se establecieron para los profesores de universidad el pasado año. Ello ha provocado peticiones de subida salarial por parte del personal no investigador del CSIC que se han traducido en continuos incidentes y paros.

Funcionarios, no

Según la tesis expuesta en los documentos de trabajo, a medio plazo resulta imprescindible la transformación radical de la naturaleza del CSIC como organización, para lo que se propone convertirlo en una sociedad estatal, al igual que se ha hecha recientemente con el Instituto de Crédito Oficial. Este proceso, calificado de reconversión, implicaría la desaparición de la figura del funcionario.Gran parte de los actuales trabajadores podrían ser incentivados para finalizar su relación laboral o trasladados a organismos no investigadores. El CSIC recibiría financiación oficial a través de un contrato programa CSIC-Estado, similar al que se establece tradicionalmente con empresas como Renfe o Telefónica.

Emilio Muñoz, presidente del CSIC, juzgó ayer positivamente los documentos sobre los que se va a discutir, aunque negó que sean un reflejo de su propio pensamiento: "Son tesis provocadoras, pero es verdad que yo siempre he defendido la necesidad de hacer un esfuerzo de imaginación y de flexibilidad para resolver los problemas que tenemos planteados". Muñoz, que hoy recibe de manos del presidente de la Academia de Ciencias de la URSS, Gury Marchuk, el nombramiento de miembro honorario, comentó: "Marchuk nos ha contado que ahora son independientes, y yo le he dicho que a nosotros nos gustaría también serlo". Serafin Valverde, presidente de la Asociacion de Personal Investigador, afirmó desconocer oficialmente la reunión y cree que la sugerencia de la sociedad estatal refleja el pensamiento de Muñoz: "Creo que es absurda, nuestra sociedad no es lo suficientemente avanzada como para que la investigación se pueda vender como cualquier otro producto". Representantes de los sindicatos implantados en el CSIC afirmaron conocer la existencia de la convocatoria pero no tener establecida su postura.

A la reunión tienen confirmada su asistencia representantes de organismos públicos de investigación europeos y españoles, de las universidades y de los ministerios relacionados con el tema, altos cargos de los sindicatos Comisiones Obreras y UGT, así como diversas empresas públicas y privadas.