El filme 'Flatliners', de Joel Schumacher, abre hoy la larga noche de terror de Sitges

La 13º edición del Festival de Cine Fantástico de Sitges, tal vez el más reputado entre los que, en Europa, se especializan en la divulgación del cine fantástico, se abre esta noche con la proyección, fuera de concurso, de Flatliners, la última película de Joel Schumacher.Un total de 18 filmes, con menor presencia de EE UU que otros años, compiten por el máximo galardón. Junto a ellos, 10 películas en la sección informativa y dos miniciclos, dedicados a la Columbia y a joyas perdidas del fantástico europeo, completan la selección, que este año se verá apoyada por un número menor de invitados que en otras ocasiones. Los últimos trabajos de Fellini, David Lynch, West Craven, Peter Fleischmann y Luc Bes se encuentran entre lo más sugerente de las propuestas.

Con un presupuesto de 60 millones, de los cuales la Generalitat aporta 40, 5 el Ayuntamiento de Sitges y 2 la Diputación de Barcelona, mientras otros patrocinadores cooperan con 7,5 millones, el Festival tiene este año como máximo objetivo la superación del bache, que supusiera la edición anterior, presidida por la necesidad de enjugar una deuda acumulada en los años precedentes.

Esta temporada, tal como reconoce el máximo responsable del certamen, el crítico Joan Lluís Goas, la cosecha del género es la mejor de los últimos años, lo que, al menos en teoría, podrá permitir la recuperación del terreno perdido.