Un albañil muerto hace tres años avaló a Juan Guerra un préstamo de Banesto para comprar su actual domicilio
Luis Cases Cosín, un albañil de la localidad valenciana de L´Horta Sud, fallecido el 17 de agosto de 1987, avaló en 1989 como máximo accionista de Estuarios y Calas del Mediterrá neo, SA un préstamo bancario de 80 millones de pesetas a Juan Guerra, en representación de Fracosur, concedido para comprar la finca Las Brujas, ubicada en Espartinas (Sevilla), donde reside actualmente el hermano del vicepresidente del Gobierno Este dato, revelado por la policía judcial de Sevilla, desenmascara a uno de los hombres de paja de la conexión de sociedades valencia nas con la trama de empresas del caso Juan Guerra.El albañil valenciano poseía a su nombre 198 millones de pesetas en Letras del Estado, del to tal de 200 millones que Estuarios y Calas depositó en la sede central del Banesto en Valencia para avalar la concesión de un préstamo a Juan Guerra. El hermano del vicepresidente del Gobierno actuó en nombre de Fracosur, sociedad de la que la pasada semana se descubrió sigue perteneciendo a sus socios fundadores -Carlos Pulido, José Bellamy y José María Ramos Reina-, y no a Juan Guerra como habían declarado éstos al juez Ángel Márquez Romero, que investiga el caso.
Este detalle añade aún más complejidad al asunto, ya que Juan Guerra no poseía autorizacíón o poder de Fracosur para suscribir préstamos, y sólo si se le creía propietario, parecía lógico que el banco le otorgase el préstamo. Tanto el fiscal de Sevi lla como el juez Márquez han so licitado un informe a Banesto en Valencia para aclarar el asunto, respuesta que aún no han recibído.
El interés se incrementa, sobre todo, porque posteriormente Estuarios y Calas solicitó a Banesto la ejecución del aval por el importe prestado a Juan Guerra -80 millones de pesetas- y embarga, en el juzgado de Instrucción número 1 de Sevilla, dos fincas propiedad de Fracosur, La Carrascosa y Las Brujas, cuya ejecución aún no se ha solicitado.
Estuarios y Calas del Mediterraneo, SA constituida en Torreblanca (Castellón) y registrada en Madrid un mes antes de que se formalizara la operación de préstamo a Juan Guerra, está integrada como socios por el abogado valenciano Javier Porcar Orti, y su hermano Rafael, así como por Luis Cases, SA, de la que era propietario el albañil fallecido hace casi tres años.
Según afirmó ayer en el diario Levante la viuda de Luis Cases, éste trabajaba "por su cuenta" aunque podría haber pertenecido a alguna empresa que ella desconocía. Asimismo añadió que ignoraba que su marido tuviera 198 millones de pesetas en Letras del Tesoro. "Yo no sé ni lo que significa eso", declaró al diario valenciano.
Otro aspecto destacado del caso es que el fallecido presentó su dimisión a Estuarios y Calas 17 días antes de morir, pero esta baja y la correspondiente nueva composición del consejo de administración no se efectuó hasta dos años más tarde, según fuentes policiales, que aseguran que durante ese periodo todas las decisiones de la empresa aparecían firmadas por el fallecido.
El Grupo de la Policía Judicial adscrito a la Audiencia de Sevilla está a la espera de recibir fondos y medios para desplazar a dos de sus inspectores a Valencia, donde según las actuales investigaciones, se encuentra una de las conexiones más importantes del caso Juan Guerra.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.