Identificadas las sustancias estimulantes prohibidas que causaron las intoxicaciones por comer hígado

Sustancias estimulantes, empleadas ilegalmente para el engorde de ganado vacuno, han sido las causantes de la intoxicación de cerca de un centenar de personas, en ocasiones familias enteras, por comer hígado de ternera en Asturias, Castilla y León, Madrid y Toledo, según los primeros resultados de la investigación oficial. Parte de ésta se ha desarrollado en una finca ganadera de la provincia de Toledo, cuyas reses fueron sacrificadas en un matadero de Aranjuez (Madrid) desde donde se distribuyeron los hígados con el producto tóxico a varios supermercados de la capital.

Los análisis de las vísceras han revelado, de acuerdo con la investigación oficial, la presencia de sustancias estimulantes -como el clembuterol y el salbutamol- que actúan sobre los receptores nerviosos y que se emplean ilegalmente para el engorde de ganado vacuno porque aumentan la secreción de la insulina y retiene líquidos. Estas sustancias, sin embargo, producen efectos secundarios como trastornos cardiovasculares y taquicardias, y nerviosos, como excitación, angustia y ansiedad. Los síntomas aparecen una hora después de ingerido el hígado de ternera y desaparecen en 48 o 72 horas.Después de las cerca de 50 intoxicaciones producidas en Madrid -aunque fuentes de la Comunidad sólo han reconocido 39 casos-, entre el 25 y el 27 de mayo pasado, funcionarios de las administraciones central, autonómica y municipal iniciaron una investigación que comenzó por requisar varias piezas de hígado en establecimientos de la cadena comercial Gama Max Coop, cuya dirección declaró a este periódico estar exenta de toda responsablidad, ya que el producto se había adquirido el mismo día de su venta a los afectados.

Los funcionarios investigaron la cadena alimenticia, comprobando que la carne había sido comprada en un matadero de Aranjuez (Madrid) y las reses sacrificadas procedían de una finca ubicada en la provincia de Toledo, cuya localización no ha sido dada a conocer para no impedir el desarrollo de las pesquisas.

Los primeros casos, alrededor de 42, se registraron en Asturias, Palencia y León, entre el 27 de marzo y el 4 de abril pasados, y no se descarta que el origen de alguna de las reses pueda ser la provincia de Toledo, aunque se sabe con certeza que, estas sustancias se están empleando ilegalmente en otras comunidades, por lo que se ha iniciado una investigación en la que participan las administraciones central y autonómica. Hay sospechas, aunque la administración no ha podido obtener confirmación, de que hayan existido algunas intoxicaciones en Extremadura, el País Vasco y Cataluña.

Redes clandestinas

Varios de los consumidores afectados en Madrid, en sumayoría residentes en la colonia de Telefónica del barrio de Mirasierra, presentaron una denuncia en la Comisaría de Policía de Fuencarral, cuyas diligencias se tramitan con el número 5.822. Una de las mujeres intoxicadas ha señalado que en el laboratorio municipal de la calle Bailén de Madrid, la han informado que en los primeros análisis de las muestras de hígado de ternera ha aparecido el clembuterol, aunque las pruebas en los laboratorios especializados van a continuar.Desde el año pasado, productos como el clembuterol o el salbutamol se emplean ilegalmente para el engorde de ganado vacuno en sustitución de las hormonas y otros finalizadores prohibidos por las legislaciones comunitaria y española. Ganaderos consultados por este periódico han afirmado que el clembuterol se puede adquirir con facilidad y sin etiquetado en el mercado negro y su utilización está siendo más generalizada, dada la crisis de precios que viene padeciendo el sector del vacuno.

Los ganaderos dicen que la administración no actúa contra quienes emplean los productos prohibidos, que consiguen considerables beneficios ya que el animal consume menos pienso a la vez que gana peso. La presencia de estas sustancias en el hígado para el consumo es debido, según los expertos, a que el animal no ha tenido tiempo de eliminarlos, dado que se administran en las últimas semanas de vida de la res.

En unas declaraciones a EL PAÍS, el 16 de noviembre 1989, Ismael Díaz Yubero, director general de salud alimentaria y protección de los consumidores, reconocía que hay redes de tráfico clandestino que cada vez tienen más paralelismo con las de distribución de drogas.

Por otro lado, el grupo parlamentario de Izquierda Unida-Iniciativa per Catalunya (IU-IC) ha pedido la comparecencia del ministro de Sanidad y Consumo, Julián García Vargas, ante la comisión de política social del Congreso para que informe sobre las medidas adoptadas y ante la extensión de las intoxicaciones.