Contradicciones entre Repsol e Industria sobre la presencia extranjera en el 'holding' del gas
La oposición del ministro de Industria, Claudio Aranzadi, a la presencia de capital extranjero en la futura gran empresa nacional de distribución del gas ha entrado en contradicción con las posturas más suaves sobre este aspecto mantenidas en los últimos meses por Repsol. Ayer mismo, un portavoz de la petroquímica semipública reiteró a este diario la neutralidad de esta sociedad: "Nosotros no nos oponemos a la presencia de British Gas", señaló.
Esta declaración contrasta con el mensaje transmitido el pasado lunes por Aranzadi al director-general de La Caixa, Josep Vilarasau. Según fuentes conocedoras de la conversación, el titular de Industria se habría mostrado contrario a la presencia directa de British Gas (que posee un 10,8% de Catalana de Gas) y de Lyonnaise des Eaux (titular de un 24% de Aguas de Barcelona y un 40% de su filial Corporación Agbar) en el gran holding distribuidor del gas.
La postura de Aranzadi, en caso de ser una condición sinequanon, significa un considerable entorpecimiento de las conversaciones en curso. "Habrá que replantearse todo el proyecto desde el principio", señaló un alto cargo de Aguas de Barcelona Este mismo alto cargo se mostró escéptico sobre los métodos que podrá utilizar Aranzadi para evitar la presencia de British Gas en Catalana, y se preguntó cómo se puede compaginar esta postura con la creación de un holding entre Repsol, por un lado, y los socios de Catalana por otro. Esta habría sido una de las últimas alternativas barajadas por Industria, ante las reticencias de La Caixa a asumir por si sola el papel de partenaire de Repsol.
En términos parecidos se pronunció también ayer el consejero de Industria de la Generalitat, Antoni Subirá, quien defendió la participación de la compañía inglesa en Catalana de Gas. "El Ministerio de Industria no puede limitar la actuación de British Gas porque su participación está adquirida de forma correcta en el mercado de valores". Para la Generalitat, en cualquier caso, "lo más importante es que se respete el programa de gasificación de las comarcas catalanas, al margen de quién sea el socio de Repsol en la futura compañía".
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