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Aranzadi propone a los sindicatos una nueva reducción de 2.000 empleos en el naval para 1991

, El ministro de Industria, Claudio Aranzadi, planteó ayer a los sindicatos UGT, CC OO y ELA-STV una reducción de 2.000 nuevos empleos en la construcción naval como condición básica para que la Comunidad Europea (CE) apruebe el plan de reestructuración llevado a cabo en el sector entre 1987 y el presente ejercicio de 1990. Las tres centrales sindicales rechazaron de partida la propuesta de¡ ministro, que, en su opinión, "supone también una forma de ir cerrando los astilleros".

La Comunidad Europea ha puesto en tela de juicio el plan de reestructuración sectorial y ha abierto un expediente por incompatibilidad de ayudas públicas. Esta situación obligaría a la devolución de las compensaciones por pérdidas que han ido recibiendo los astilleros en estos años y que ascienden, según el Ministerio de Industria, a 80.000 millones de pesetas. Además, la CE tampoco acepta la solicitud de España para que se prorrogue el régimen especial de ayudas al naval que nuestro país, al igual que Portugal, ha disfrutado durante los dos últimos años.La Administración nada entre dos aguas intentando pactar con los sindicatos un acuerdo que reciba el beneplácito de Bruselas como garantía para la supervivencia de la industria naval española. La naturaleza del problema es doble ya que tanto la devolución de las subvenciones como la reducción del nivel de primas que recibe ahora el sector implicaría la quiebra de los astilleros. Esto es algo en lo que coinciden plenamente tanto el Ministerio de Industria como los representantes de los trabajadores.

Rechazo sindical

Sin embargo, las centrales sindicales se oponen a asumir un nuevo ajuste y exigen previamente4a negociación de una serie de medidas complementarias que aseguren la competitividad del sector. Dichas medidas se estructuran en inversiones destinadas a la modernización tecnológicas de los astilleros, ayudas para investigación y desarrollo y actuaciones de apoyo a la formación profesional, así como aportaciones que contribuyan a facilitar el saneamiento financiero de los distintas empresas afectadas: "Es cierto que se puede provocar el cierre de los astilleros mediante el retraso de subvenciones o de primas, pero también con la reducción de las plantillas", añadieron los representantes de los trabajadores.

Las centrales sindicales se mostraron especialmente duras con la actitud de la Administración y añadieron que "no es muy ético hablar de nuevos ajustes de empleo cuando todavía no se han cumplido algunos de los compromisos previstos en el plan". En en el astillero de Astano en Ferrol quedan aún por recolocar 180 trabajadores y en la fábrica de Aesa en Bilbao otros 40.

La propuesta del ministro supone, pese a todo, una medida de compromiso ante la actitud de la CE, ya que en el fondo el objetivo comunitario apunta al cierre de alguna de las instalaciones productivas. El Ministerio de Industria considera que el incremento de la demanda dentro del sector aconseja mantener los actuales astilleros y a cambio trata de persuadir a los sindicatos para que acepten una reducción de 2.000 empleos sobre los 18.500 puestos de trabajo que deberá tener el sector a finales de este año. El ajuste propugnado se llevaría a cabo de 1991, por lo que al cierre del próximo ejercicio la plantilla total del sector ¡debería quedar fijada en 16.500 trabajadores. En 1983 existían en la construcción naval más de 40.000 empleados. Las negociaciones entre el ministerio y los sindicatos continuará el próximo día 12. Previamente el miércoles día 6 los tres sindicatos se reunirán para establecer una propuesta unitaria.

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