Retirado el proyecto de creación del Banco de Mallorca

El grupo de empresarios mallorquines que promovían la nueva entidad Banco de Mallorca, y cuyo expediente ya había sido completado y enviado a la Dirección General del Tesoro y Política Financiera, ha desistido de su intento, una vez que el Banco de España no había emitido un dictamen favorable al proyecto y que el Tesoro no veía clara la víabílidad del mismo. Es el primer proyecto de los presentados al amparo de la legislación de nuevos bancos que no se convierte en realidad, aunque todavía se encuentra pendiente de autorización el Iberbank, entre cuyos accionistas importantes se encuentra el grupo Euris, en el que participa el financiero Jacques Hachuel.Tras la aprobación del proyecto de nuevo banco que promueven un grupo de empresarios catalanes entre los que se encuentran Luis Prenafeta, Raventós y José Ferrer, y que operará con el nombre de Privat Bank, el proyecto que lideraba el financiero mallorquín Valentín Fernández Tubau ha finalizado su andadura sin comenzar a funcionar, según confirman fuentes de la Dirección General del Tesoro. La nueva entidad que pretendía operar en el transcurso del presente año contaba entre sus promotores a conocidos empresarios mallorquines como Pedro Montaner, destacado empresario turístico del archipiélago balear; Fernando Piña, ex subsecretario de Aviación Civil, y Julio Iranzo, ex presidente del Banco Hipotecarlo de España.

Entre los empresarios que se sumaron al proyecto en un primer momento estaba el barón Von Wernitz, antiguo propietario de la compañía aérea de vuelos charter Spantax, con sede social en Palma de Mallorca, que se incorporaba al proyecto con la intención de efectuar fuertes inversiones en la nueva entidad bancaria. Este socio no fue muy bien recibido en las instancias oficiales tanto del Banco de España como del Ministerio de Economía por lo que al final parece que salió del equipo de los impulsores del proyecto.

En un segundo momento se sumaron al proyecto financiero otra serie de empresarios, entre los que destacaban Guillermo Entrecanales, primo de José María Entrecanales, que dirige la conocida empresa constructora, y Roberto Pombo y Agustín González Mozos, así como la familia constructora burgalesa Cutillas.

La estrategia que habían diseñado los promotores, y que había despertado una gran expectación en los círculos financieros y empresariales de las islas Baleares, establecía la sede central en Mallorca y no concretaba el número de oficinas hasta que no se viera la reacción del mercado. La primera intención era abordar el negocio de la banca comercial en general.

La normativa sobre creación de nuevos bancos que aprobó Economía y Hacienda durante el año 1988 establece un capital mínimo de 1.500 millones de pesetas, de los que el 20% han de desembolsarse en el momento de presentar la documentación al Tesoro. La nueva ley también establece el reparto de capital y la representación en el consejo de administración, además de contar con la controvertida cláusula de honorabilidad para los promotores de la nuevas entidades.

Desde que se promulgó la nueva legislación han visto la luz verde el Banco de Alcalá, promovido por la familia Argüelles; el Banco Europeo de Finanzas, que puso en marcha Eurocapital; el Banco de Inversión y Finanzas, que capitaneaba Fibanc; el Banco Sabadell Multibanca y el Privat Bank, y la conversión en bancos de Finesor, la Caja de Crédito Privada y Credipas.