Mueren 8 de los 10 rebecos trasladados a Cantabria

Ocho de los 10 rebecos capturados en los Picos de Europa por la Diputación de Cantabria para ubicarlos en el parque natural de Cabárceno murieron a las pocas horas, otro pereció despeñado y sólo dos sobreviven en su nuevo hábitat, lejos de su medio natural. Este suceso ha provocado que el Partido Regionalista haya cursado una pregunta al Gobierno autónomo y la denuncia de la operación, que califica de "asesinato con premeditación", a la Asociación Protectora de Animales. La decisión de introducir rebecos en este parque fue tomada por el presidente de Cantabria, Juan Hormaechea.

Varias personas dependientes del Servicío de Montes de Cantabria participaron recientemente en una batida bajo Peña Remoña (estribaciones de los Picos de Europa, a 1.224 metros de altitud) para la captura de 10 rebecos vivos rupicapra rupicapra.La guardería de Riaño (León), experta en operaciones de este tipo, asesoró previamente al personal cántabro aconsejando el uso de redes especiales estratégicamente colocadas mientras el helicóptero sobrevolaba la zona, procurando que los rebaños se orientaran hacia las mallas.

Uno de los rebecos murió al caer al abismo, mientras ocho, trasladados por vía aérea hasta Cabárceno, perecían a las pocas horas o al día siguiente de su entrada en el Parque de la Naturaleza. Veterinarios desplazados a los Picos de Europa aplicaron inútilmente a los animales un anestésico y un tranquilizador.

Los especialistas participantes en la captura no saben a qué atribuir el fracaso de la operación, que los regionalistas consideran se llevó a cabo con el más puro "estilo Rambo": si al talante extremadamente nervioso de las gamuzas, que no pudieron resistir las emociones del azaroso apresamiento, o a su inadaptación a la cautividad.

En la zona cántabra de los Picos de Europa, que frecuentaba casi todos los otoños el anterior jefe del Estado, hay censados actualmente unos 2.500 rebecos, cuya caza mediante control se autoriza en determinada época del año.

De unos 35 kilos de peso, los rebecos tienen su hábitat entre 800 y 2.000 metros sobre el nivel del mar. Si se le deja vivir en paz, este mamífero, genuinamente europeo, alimentado de hierbas, líquenes y gramíneas de alta montaña, puede vivir entre 15 y 20 años.

Especies autóctonas

La decisión de introducir rebecos en el parque de la Naturaleza de Cabárceno, al otro lado de la bahía de Santander, corresponde al presidente Juan Hormaechea, muy obsesionado por las especies autóctonas, que parece haberse quebrado a causa de la hipersensibilidad de la especie.Hormaechea inauguró el parque en el pasado mes de diciembre y hasta ahora ha sido visitado por más de 150.000 personas. Aquél se asienta en un antiquísimo y espectacular yacimiento de hierro explotado ya por los romanos. Mucho más fácilmente que las gamuzas, parecen encontrar aquí su aclimatación elefantes y renos, osos y lobos. A los rebecos les va a resultar difícil olvidar las cresterías de los Picos de Europa.

Los regionalistas acusan al presidente Hormaechea de que, tras pregonar su amor a los animales, haya cometido el error de intentar incluir en la plantilla zoológica de Cabárceno a estos nerviosos moradores de los Picos de Europa, acostumbrados a vivir en territorios mucho más escarpados y abiertos.