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AIcohóIicos de familia

Científicos estadounidenses descubren un gen vinculado a la dependencia del alcohol

"Gggué le vamos a hacer. Lo mío -híp- es genético". Cualquier borrachín de nariz enrojecida puede contestar así, a partir de ahora, mientras sujeta sin mucha convicción una farola. Científicos estadounidenses han identificado por primera vez, un gen que parece incrementar el riesgo de ser alcohólico. Solamente en Madrid, el 12% de los hombres mayores de 18 años y el 1% de las mujeres practican abusivamente el conocido deporte del levantamiento de vidrio en barra fija, que causa 10.000 muertes al año en España.

El nuevo descubrimiento se une al goteo que se produce últimamente de comunicaciones científicas que aseguran haber descubierto genes vinculados a diversas enfermedades.A finales del pasado mes, por ejemplo, la revista especializada The New England Journal of Medicine se hacía eco del descubrimiento, por científicos de Utah (EE UU), de un gen mediante el cual se puede explicar la propensión de algunas familias a padecer un tipo de tumor frecuentísimo, el cáncer de colon.

Conductas placenteras

El hallazgo del material genético vinculado al alcoholismo, -y a otras conductas placenteras y dependientes- abre la puerta al posible diseño de pruebas sanguíneas para detectar a las personas en riesgo, -que podrían estar listas en cinco años, según los investigadores- o de nuevos fármacos para contrarrestar los efectos de esta dependencia.Mediante complicadas prue bas de laboratorio y análisis es tadísticos, Ernest P. Noble, de la Universidad de California (Los Ángeles) y Kenneth Blum, de la Universidad de Texas, en San Antonio, estudiaron, en busca del gen, los cerebros de 70 cadaveres, 35 de los cuales habían muerto como conse cuencia del alcoholismo.

Según los investigadores, el gen liga,do al alcoholismo, mu cho más común entre los bebe dores que entre los abstemios, es el del receptor D2 de la dopamina, una sustancia química que juega un papel crucial en la trasmisión de información de una neurona a otra.

El receptor se encuentra en la superficie de la célula nervio sa, a la espera de que la dopa mina se le una para desatar la cascada, de información.

El gen responsable está situado en el cromosoma 11 y una de sus formas (alelo) es la que está relacionada con el alcoholismo.

Correo nervioso

Investigaciones previas habían demostrado que la dopamina -una suerte de correo entre las células nerviosas- interviene en las conductas que buscan vivencias placenteras como el alcohol.El gen del receptor D2 de_ dopamina estaba presente en el 77% de los cerebros de los bebedores y ausente en el 72% de los encéfalos de los abstemios. Teóricamente, el gen puede modificar el número de receptores de dopamina o afectar la unión de la dopamina al receptor con lo que se puede modificar la actitud del sujeto e inducirle a buscar más alcohol.

Tanto los científicos firmantes del artículo, publicado ayer en The Journal of the American Medical Association, como otros expertos señalaron que se necesitan investigaciones posteriores. "Estos resultados permiten considerar el alcoholismo más como una enfermedad que como un debilidad moral", manifestó Blum.

Numerosos estudios han señalado el carácter familiar de esta dependencia, aunque ha resultado difícil separar las causas ambientales y hereditarias del alcoholismo, que en España se está incrementando con rapidez: sólo en los últimos 20 años, el consumo de licores se ha quintuplicado, y el de cerveza se ha multiplicado por ocho.

Los científicos señalaron que el gen no está vinculado a todas las formas del alcoholismo. Serían causas sociales y culturales las responsables de otras variantes de la dependencia.

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