_
_
_
_
Editorial:
Editorial
Es responsabilidad del director, y expresa la opinión del diario sobre asuntos de actualidad nacional o internacional

Vandellòs todavía

EL ACCIDENTE de la central nuclear Vandellòs aumentó, comprensiblemente, el recelo general sobre la seguridad de estas factorías que cobijan un proceso físico que exige una alerta perpetua. Ahora, el Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) admite la eventualidad de su reapertura si la empresa propietaria del complejo, Hifrensa, ajusta la instalación a una serie de costosas exigencias. Para determinados sectores, no existe certeza sobre la seguridad de estos artefactos y, en consecuencia, la única política tolerable es la condena de lo nuclear. Para otros, es admisible hablar de garantías suficientes y en esta línea se inscribe el informe del CSN al enumerar las condiciones técnicas que debe cumplir la gigantesca reparación de Vandellòs 1 para que pueda regresar a la vida productiva.Cuando Hifrensa haya explicado cómo piensa cumplir este pliego de condiciones y su respuesta se considere técnicamente aceptable, el Gobierno deberá decidir si otorga una nueva licencia de explotación. En cualquier caso, al margen del debate global sobre el fomento o supresión de fuentes nucleares de energía, la decisión no deberá tomarse viciada por consideraciones de conveniencia política o económica. Es obvio que la reparación de la central tendrá un alto coste y es exigible que en los cálculos para amortizar los mismos no entre la hipótesis de repercutir parte de ellos en la población mediante la política de tarifas. Tampoco deben jugar en esta difícil decisión previsiones sobre la repercusión publicitaria de la medida. Sería denunciable que Vandellós volviera a abrirse para no alentar, con su cierre, los movimientos antinucleares, en plena discusión de un nuevo Plan Energético Nacional, cuya redacción debe ultimar Industria este año. La respuesta sobre la reapertura, o no, debe estar fundada en los cálculos del PEN, pero, sobre todo, en el argumento de la seguridad.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_