Un comando libera a un golpista filipino
Un grupo de soldados rebeldes liberó ayer de madrugada al teniente coronel Billy Bibit, encarcelado en una prisión de Manila por su participación en el intento de golpe de Estado contra la presidenta de Filipinas, Corazón Aquino, ocurrido el pasado mes de diciembre. Un portavoz de la Policía Militar, coronel Crescencio Maralit, declaró que al menos 15 soldados, enmascarados y armados con rifles automáticos, asaltaron la cárcel a bordo de un camión robado y se llevaron a Bibit, tras efectuar disparos al aire. Un policía y un civil resultados levemente heridos. Bibit había proporcionado previamente dinero a sus guardianes para que tomaran cerveza.
La presidenta Aquino reaccionó furiosamente al conocer la noticia, según una portavoz oficial. La fuga sucedió un día después de que se declarara alerta roja en todo el país por el temor a que las vacaciones fueran aprovechadas por los soldados rebeldes para liberar a camaradas encarcelados o para intentar un nuevo golpe. Fuentes oficiales dijeron que los asaltantes de la prisión probablemente pertenecían al Movimiento de Reforma de las Fuerzas Armadas, protagonista de la intentona golpista del 1 de diciembre.
Bibit, antiguo jefe de Seguridad de Aduanas que participó en la intentona al mando de 300 hombres, fue detenido en enero después de que se ofrecieran 23.000 dólares de recompensa por su captura.
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