Veinte expertos para una operación
"El trasplante de un órgano provoca una situación bastante espectacular en la que están implicados gran número de profesionales", afirma el doctor Enrique Moreno. En total, más de 20 especialistas para realizar una de las intervenciones más espectaculares y vitales de la cirugía moderna. "Y a ello hay que añadir", advierte, "toda la actividad generada en torno al traslado del órgano y a los trámites legales para su utilización".Este médico insiste en que el mérito no es única y exclusivamente del cirujano: "Un amplio equipo, compuesto por cirujanos, anestesistas, intensivistas, internistas, inmunólogos, hematólogos y bioquímicos, es el responsable de someter la víscera a los controles necesarios y hacer que sea, trasplantada con éxito en el receptor. Incluso mi propia labor como cirujano, y lo digo sin falsa modestia, no tendría ningún mérito sin la colaboración de médicos como los doctores Ignacio García, Ramón Gómez, Ignacio G. Pinto, Dámaso Riaño y Francisco P. Cerdá".
Enrique Moreno, una de las primeras autoridades mundiales en trasplante hepático, ha realizado 122 operaciones quirúrgicas de este tipo desde abril de 1986, con un índice de supervivencia en los pacientes al año del injerto que se acerca al 80% de los casos. Esta cifra está considerada como una de las más altas del mundo, desde que en 1973 empezaran a hacerse los primeros trasplantes de hígado en Estados Unidos.
Este especialista y todo su equipo se sienten muy orgullosos de los trasplantes practicados en Dolores Madolell y Josefa Blázquez, que por la singularidad de sus características son los primeros en la literatura médica universal.
Embarazo normal
Respecto a la primera paciente, Moreno asegura que "el embarazo de Dolores sigue su curso con toda normalidad, y sabemos por todos los controles realizados que el feto no ha sufrido ningún daño por la operación, ni siquiera por las drogas inmunosupresoras que estamos administrando a la madre para evitar el rechazo del nuevo órgano".
En cuanto a Josefa Blázquez, confía en que esta paciente vaya normalizando la función pulmonar, muy afectada por la gravedad de su enfermedad, y en que esta vez su organismo acepte el segundo injerto.
Según señala este cirujano, la operación de extracción del órgano del donante dura unas dos horas y la intervención para instalarlo en el receptor, unos 60 minutos. Sin embargo, el tiempo real de quirófano con todos los actos preoperatorios se prolonga durante unas 12 horas. Este tiempo se duplica si su cómputo se realiza desde la localización del órgano para el trasplante hasta que el paciente es trasladado a la unidad de vigilancia intensiva (UVI).
El promedio de días de hospitalización que requiere un enflermo sometido a un trasplante hepático es de 25; periodo que, según las características y la evolución del paciente, se puede reducir a dos semanas o ampliar hasta un mes y medio.
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