El paro aumentó en el último trimestre en 53.400 personas, la primera subida desde 1987

Madrid El paro aumentó durante el último trimestre de 1989 en 53.400 personas, según los datos de la Encuesta de Población Activa (EPA). Este aumento de¡ desempleo es el primero que se produce desde el tercer trimestre de 1987 y no es achacable a ningún aumento de la tasa de actividad, ya que en ese período el índice de actividad disminuyó ligeramente. El desempleo, al cierre de 1989, afecta al 16,89% de la población activa.

La encuesta de población activa arrojó en el último trimestre de 1989 la primera subida del desempleo desde el tercer trimestre de 1987. El paro aumentó durante el último trimestre del pasado año en 53.400 personas, con lo que la tasa de desempleo afecta al 16,89% de la población activa, por encima del 16,57% del tercer trimestre. A pesar del repunte del último trimestre, 1989 cierra con una caída del desempleo de 179.400 personas, según los datos de la EPA, ya que los datos del cuarto trimestre arrojan 2.521.800 parados, frente a 2.701.200 del año anterior. El aumento del desempleo en el último trimestre ha afectado principalmente a los varones, y dentro de este colectivo a los jóvenes entre los 20 y los 24 años. De los 53.400 parados más del último trimestre, 53.100 son varones y sólo 300 parados más son mujeres. Entre los más jóvenes, sin embargo, el paro se redujo, tanto entre los hombres como en el colectivo de mujeres.Este crecimiento del desempleo convive con una disminución de la tasa de actividad, es decir, el aumento del paro se suma a un mayor número de inactivos. El total de inactivos (los que no buscan trabajo) aumentó en 71.200 personas, repartidos en 24.600 hombres más y 46.500 mujeres.

El sector de la construcción es el que ha soportado un mayor aumento de la tasa de desempleo, al pasar de 176.300 a 202.500 parados. En número de parados, el mayor aumento corresponde al sector servicios, con un incremento de 54.700 personas. Por contra, el paro disminuye -en 45.000 personas- entre los trabajadores que buscan su primer empleo.

El aumento del paro, y la paralela caída en la ocupación ha convivido con un mayor grado de precarización en el empleo. La caída de la ocupación en el último trimestre de 1989 afectó a 18.600 personas, según los datos de la EPA. A pesar de esta disminución en la ocupación total, 35.900 nuevos trabajadores fueron empleados con un contrato temporal, mientras que se firmaron 9.300 contratos indefinidos menos.

La mayor reducción en la ocupación se concentró entre los trabajadores no asalariados, si se atiende al tipo de contrato, y entre los trabajadores empleados a tiempo completo si la medición se hace según la duración de la jornada. El empleo a tiempo parcial, sin embargo, ocupó a 10.900 personas más durante ese trimestre.

Unos datos "raros"

Los datos de la encuesta de población activa (EPA) fueron calificados ayer de "raros" por el ministro de Economía y Hacienda, Carlos Solchaga, quien aseguró que sus previsiones apuntaban a un crecimiento del empleo en lugar de a un aumento del paro. A juicio del ministro, el aumento del paro que refleja la EPA obedece a "saltos en el nivel de participación' de la población activa".

El problema es que ese salto no se ha dirigido hacia un aumento de la actividad sino a una disminución de ésta. El titular de Economía resaltó, no obstante, que los resultados del trimestre no alteran al balance presentado hace poco sobre la creación de empleo en el año.

La interpretación de las centrales sindicales del cambio de tendencia en la evolución de las cifras de empleo es diametralmente opuesta. A juicio de Apolinar Rodríguez, secretario de acción sindical de UGT, este estancamiento en el mercado de trabajo es el primer efecto de las medidas de enfriamiento económico". Comisiones Obreras es aún más tajante al afirmar que "esta disminución del empleo sólo puede entenderse como efecto directo de las medidas de ajuste adoptadas por el Gobierno en julio".

Las centrales sindicales destacan asimismo el aumento de la eventualidad en la contratación en un momento en el que cae la tasa de actividad, sobre todo entre las mujeres. Para UGT, estos datos son una clara muestra de "la sustitución que se está produciendo desde el empleo fijo al temporal". CC OO se muestra preocupada por si este cambio de signo en la evolución del empleo modifica la tendencia. A su juicio, "no es aceptable una política económica que obsesionada por minorar los desequilibrios macroeconómicos reduzca la ocupación y aumente el desempleo". Por comunidades, el paro aumenta en Andalucía, Aragón, Asturias, Baleares, Castilla-La Mancha, CastillaLeón, Cataluña, Extremadura, Madrid, País Vasco y Rioja.