Los sandinistas acarician un eventual triunfo refrendado por observadores internacionales
ENVIADO ESPECIALEl Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN) acaricia, a cuatro días de las elecciones con mayor trascendencia de la historia de Nicaragua, la posibilidad de una victoria con el refrendo de los observadores internacionales. La comisión de las Naciones Unidas para la Verificación de las Elecciones en Nicaragua (ONUVEN) ha declarado que el proceso es "positivo" y que las posibilidades de fraude son muy remotas.
Después de la manifestación del pasado domingo, saldada con un éxito notable pero no espectacular, la Unión Nacional Opositora (UNO) ha entrado en un prolongado silencio, dejando todo el espacio para la propaganda del FSLN, que ha inundado el país. La impresión de victoria sandinista se ha extendido rápidamente -con ayuda de las últimas encuestas- y la mayor parte de los observadores independientes y medios diplomáticos apuestan por un triunfo de Daniel Ortega por un margen que incluso podría sobrepasar el 10 % de los votos.
El responsable de la campaña del Frente, comandante Bayardo Arce, predijo ayer "con absoluta seguridad" el triunfo de su partido y añadió que será "un triunfo a todas luces abrumador para no dejar dudas sobre la voluntad revolucionaria y de paz del pueblo nicaragüense".
La fuerza del FSLN son 2.826 casas de campaña en todo el país, más de 500 comités de acción electoral, 80.000 activistas busca del voto, más de 15.000 fiscales electorales y más de seis millones de dólares en gastos de propaganda (de los cuales dos han sido obtenidos mediante la venta de bonos y otros tres a través de la ayuda internacional), según cifras facilitadas por el comandante Arce. Una maquinaria que en la región sólo puede superar el Partido Revolucionario Institucional (PRI) de México.Contra eso -y con excepción de un profundo y prudente discurso de cierre de campaña de Violeta Chamorro-, el principal argumento de la UNO en la recta final de la campaña ha sido sembrar la sospecha del fraude. Chamorro hizo el domingo un llamamiento contra la violencia postelectoral, pero otros miembros de su coalición apuestan claramente a la certeza del fraude. Arce declaró que su partido reconocería una victoria de la oposición en el caso de que así lo determinasen los resultados del Consejo Supremo Electoral.
Evolución positiva
Por su parte, el paquistaní Iqbal Riza, director de la misión de la ONUVEN, afirmó el lunes: "Si todo transcurre como hasta ahora, se deberán aceptar los resultados que ofrezcan las urnas el próximo día 25". "La evolución del proceso en estos momentos es positiva", opinó.Según el portavoz de la ONUVEN, "el fraude electoral de forma masiva es imposible que se produzca porque habrá multitud de observadores controlando el proceso electoral". Iqbal Riza añadió que, sin embargo, "no se puede descartar que se produzcan casos aislados de manipulación electoral".
Dirigentes de la UNO mencionan en conversaciones privadas que algunos de los miembros de la ONUVEN y de la misión de la OEA tienen una cierta inclinación prosandinista. La cadena de televisión norteamericana Univisión recogía ayer las declaraciones de un observador que había contado 200.000 personas en la manifestación de Daniel Ortega en la ciudad de León, cuando la mayor parte de los corresponsales extranjeros aseguraban que no había más de 30.000.
Riza asegura que la misión de la ONU está integrada con verdaderos especialistas. "Contamos con expertos en este tipo de situaciones y además hay un grupo de alto nivel que ha visitado Nicaragua durante todo el proceso", dijo. Los observadores de la ONU pertenecen a cincuenta nacionalidades y han sido escogidos entre expertos en técnicas electorales y funcionarios permanentes.
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