El Ejército surafricano, implicado en el asesinato de militantes 'antiapartheid'

ENVIADO ESPECIALUna unidad secreta del Ejército surafricano está implicada en el asesinato de dos prominentes activistas contra el apartheid y en la ejecución de otras acciones terroristas contra grupos de izquierda, según se ha revelado en el curso de una vista criminal en Johanesburgo sobre las actividades de un ex policía acusado de trabajar para esa unidad.

La investigación de los asesinatos, ocurridos el año pasado, del abogado Anton Lubowski, miembro de la SWAPO de Namibia, y del profesor de universidad David Webster, ha llevado a la detención de un antiguo policía con mando intermedio en el Buró de Cooperación Civil (BSB). Esta entidad, de acuerdo con lo manifestado ante el tribunal por el jefe policial general Floris Mostert, es una unidad secreta del Ejército que opera dividida en células independientes que se desconocen mutuamente. Una de estas células es "responsable de asesinatos, incendios, atentados con bombas, asaltos e intimidaciones", cuyo aparente objetivo era eliminar o amedrentar a sospechosos de pertenecer al Congreso Nacional Africano (ANC) y afines.

El Ejército ha reconocido que la misión del BSB era actuar contra elementos "agresores" del sistema como el partido comunista o quienes se han movilizado contra la incorporación de soldados a la mili. La unidad en cuestión es parte de las fuerzas especiales del Ejército, que reciben órdenes del jefe de Estado Mayor.

Alrededor de 50 activistas han sido asesinados en la última década en Suráfrica y otras partes del mundo en operaciones de limpieza llevadas a cabo por elementos anónimos. Es la primera vez que hay confirmación oficial de la implicación del Ejército.

El ANC, que discute estos días su respuesta al discurso del presidente De Klerk, dice estar dispuesto a perdonar todos los crímenes políticos de que ha sido víctima. A su vez, Nelson Mandela sigue dando señales de que la negociación entre el ANC y el Gobierno es posible. "Estamos comenzando a eliminar la atmósfera de desconfianza y sospecha... Hemos hecho mucho para establecer los fundamentos de la futura negociación y estoy convencido de que podemos salvar todas las diferencias y discutir nuestro futuro", afirmó.

Mandela en una entrevista con la cadena de televisión estatal hizo ayer un llamamiento a "todos los surafricanos blancos a respaldar plenamente al presidente Frederik de Klerk, porque él lo merece".

Mientras tanto, la liberación del líder negro y la legalización del ANC eran criticadas por miles de manifestantes de derecha y ultraderecha en una manifestación convocada por el Partido Conservador en Pretoria. Ante pancartas que clamaban contra Mandela y los planes de De Klerk, el vicelíder del partido, Ferdi Hartzenberg, acusó al presidente surafricano de poner en práctica una política no sometida al juicio del electorado. "Ha comenzado la marcha de liberación de los afrikaners", dijo. "No seremos gobernados por otras razas".

[El Parlamento Europeo, por otra parte, apeló ayer a los países de la CE a "mantener la presión económica, financiera y diplomática" contra el régimen racista de Suráfrica hasta el fin del apartheid, del que la liberación de Mandela es sólo un paso "preliminar", informa Reuter].