Gaddafi adelanta por sorpresa su llegada a Túnez para asistir a la 'cumbre' magrebí

ENVIADA ESPECIAL

El líder libio, Muammar el Gaddafi, decidió ayer de forma inesperada adelantar su llegada a Túnez para tratar de mejorar las relaciones bilaterales con su vecino tunecino antes de dedicarse plenamente a la cumbre de la Unión del Magreb Árabe (UMA), creada el 17 de febrero de 1989, que comienza mañana, en esta capital.

En el mismo aeropuerto de Túnez, Gaddafi destacó la importancia de la reunión de los cinco jefes de Estado (Libia, Túnez, Argelia, Marruecos y Mauritania) en la "consolidación del proceso de edificación magrebí".

Sin embargo, y a pesar de los esfuerzos realizados por el presidente de Túnez, Zine el Abidine Ben Alí, los analistas son pesimistas en cuanto a los resultados de la reunión. "No existe ni comercio, ni vías de comunicación, ni cooperación cultural, técnica o política entre los cinco países. Para echarse a andar, la UMA precisa primero acabar con la desconfianza y las fuertes diferencias bilaterales. Su única base es el convencimiento de intelectuales magrebíes de que para hacer frente a la realidad hay que integrarse en bloques regionales", señalan fuentes europeas.

El adelanto de la llegada de Gaddafi, que, como el resto de los jefes de Estado, era esperado hoy, tiene como fin calmar el descontento existente en Túnez por no haber cumplido sus compromisos de ayuda en un proyecto de exploración petrolífera y concesión de permisos de trabajo a 10.000 tunecinos.