12 kilómetros de atascos en los accesos desde Toledo y Andalucía por la huelga en los Autobuses del Sur

Más de 12 kilómetros de retenciones tuvieron que soportar los conductores que ayer por la mañana accedieron a Madrid por las carreteras de Andalucía y de Toledo. La primera jornada de huelga del año de los trabajadores de la empresa Autobuses Urbanos del Sur, cuyas líneas unen la capital con Getafe, puso en jaque los accesos a la ciudad desde el sur. A los atascos de estas autovías hubo que sumar los que se produjeron en el acceso desde Extremadura y en toda la ciudad debido a la avalancha de vehículos escolares por el inicio del curso, así como en las zonas comerciales por el comienzo de las rebajas. La relativa calma circulatoria que se había vivido en las dos últimas semanas en Madrid se rompió ayer.

Los paros de los trabajadores de la empresa Autobuses Urbanos del Sur afectaron directamente al desarrollo del tráfico originando, según la Policía Municipal, retenciones de 12 kilómetros en los accesos a la capital por las carreteras nacionales de Toledo y de Andalucía y también fuertes retenciones en el casco urbano de Getafe hasta las diez de la mañana, informa .Los afectados por estos paros parciales, que se desarrollaron desde las 5.45 hasta las 8.45, son unas 10.000 personas que en dicha franja horaria tuvieron que optar por los servicios de cercanías de Renfe, empresa que incrementó ayer el número de vagones y la frecuencia de paso en la línea Parla-Madrid.

Según fuentes de la empresa, para estas nuevas movilizaciones el Consorcio Regional de Transportes decretó unos servicios mínimos, que no se cumplieron ayer "por la existencia de unos 30 piquetes en las cocheras que impidieron la salida de los vehículos". El presidente del comité de trabajadores, por su parte, manifestó que no tenía conocimiento de que hubiese una orden del consorcio. "Esto es una forma de coaccionarnos", alegó.

El Ayuntamiento de Getafe, en su última sesión plenaria, decidió solicitar la mediación del consorcio en el conflicto. Asimismo se planteó por unanimidad realizar un informe sobre la empresa Autobuses Urbanos del Sur para controlar si son lógicas tantas movilizaciones en tan breve tiempo (a finales del año pasado también hubo movilizaciones). El consorcio ha decidido tomar cartas en el conflicto, ya que ambas partes han pedido su mediación. Trabajadores y empresarios comenzarán hoy una ronda de negociaciones en busca de un acuerdo sobre el convenio colectivo, según informaron ayer fuentes del consorcio. Mientras no se llegue a un acuerdo, los paros se realizarán de lunes a jueves, de forma indefinida.

También la carretera de Extremadura soportó ayer fuertes atascos. En esta autovía se dejó sentir en parte la huelga de los trabajadores de Autobuses Urbanos del Sur. Según fuentes del gabinete municipal de información al tráfico, la hora punta se prolongó hasta las diez de la mañana. En el resto de los accesos de la ciudad también se produjeron atascos, aunque no más de los habituales, según precisaron las mismas fuentes.

Los atascos se extendieron posteriormente al casco urbano de Madrid. Los datos que arrojó ayer el ordenador del Ayuntamiento de la capital ponían de manifiesto que la ciudad volvía a la normalidad, es decir, a los atascos. La circulación fue un 10% más intensa que la registrada durante las vacaciones de Navidad y un 4%. superior a la media que se registra cualquier lunes del año.

Rebajas y colegios

Uno de los motivos de este aumento de los atascos estuvo en un elemento ajeno al tráfico: el comienzo de las rebajas de enero. Las mayores aglomeraciones se produjeron en los alrededores de las zonas comerciales de Alcalá, Goya y Azca.Pero quizá el elemento determinante de la vuelta a la normalidad fue el reinicio del curso escolar. Unos 1.500 autobuses escolares circularon ayer por la ciudad y se detuvieron en alguná de las 562 paradas oficiales, haciendo aumentar los índices de saturación de las calles.

Para colmo de males, la rotura de una tubería de agua en la calle del Españoleto ocasionó un socavón de 36 metros de largo por 2,5 metros de ancho, por lo que tuvo que ser cortado el tráfico en el tramo comprendido entre dicha calle y la de Santa Engracia.