El 'conseller' de Economía, Macià Alavedra, nuevo hombre fuerte del Gobierno catalán

Macià Alavedra fue nombrado ayer tarde nuevo conseller de Economía y Finanzas de la Generalitat, convirtiéndose en el hombre fuerte del Gobierno catalán. Alavedra tendrá bajo su área directa de responsidabilidad la fusión de la Caixa de Pensions y de la Caixa de Barcelona y la revisión del sistema de financiación autonómica.

El presiente de la Generalitat, Jordi Pujol, optó, finalmente, por nombrar a Joan Vallvé, su colaborador en asuntos europeos, como nuevo conseller de Agricultura. El portavoz convergente en el Parlamento autonómico, Antoni Subirá, ocupará la cartera de Industria y Energía, puesto que deja vacante Alavedra con su ascenso.Pujol consiguió ayer al filo del mediodía cerrar su octavo Gobierno desde 1980. Como ya había anunciado, apostó por la línea de la continuidad y nada da a entender que los nuevos consellers vayan a imprimir un aire distinto a sus departamentos. Alavedra, que se convierte en el responsable de Economía, recupera el protagonismo que ya tuvo en el Ejecutivo durante los cuatro años (1982-1986) que ocupó el Departamento de Gobernación. Su fama de hombre negociador y de consenso deberá confirmarla con la negociación para la fusión de la Caixa de Pensions y la de Barcelona, operación de la que se declara ferviente partidario, y en la discusión con el Ministerio de Economía para fijar, no más tarde de 1991, el nuevo sistema de financiación autonómica.

Este último asunto es una de las cuestiones capitales del nuevo Gobierno catalán, ya que Pujol atribuye muchos de los ahogos económicos de la Generalitat al actual sistema de financiación negociado en 1986 por el entonces conseller de Economía, Josep María Cullell.

La resolución de la crisis gubernamental, supone, por otra parte, una derrota evidente de Miquel Roca, que, a diferencia del Gobierno conformado por Pujol en 1988, se tiene que conformar ahora con haber impedido, que el secretario general de Agricultura, Joan Ignasí Puigdollers, fuera nombrado conseller del citado departamento. Ninguno de los tres consellers designados ayer por Pujol son hombres de una perfil roquista, apelativo con el que se conoce a los seguidores del secretario general de Convergéncia.

En el descarte efectuado por Pujol ha quedado fuera el director general de la Corporación Catalana de Radio y Televisión, Joan Granados, de quien se ha venido asegurando en las últimas fechas que sólo continuaría en la Administración autonómica si tenía en hueco en el Gobierno catalán.