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La policía perdió la pista a siete de los nueve 'grapo' cuando salieron de la cárcel en los últimos tres años

Siete de los nueve activistas de los GRAPO que integran los comandos que han efectuado las últimas acciones salieron de la cárcel hace dos o tres años. Fuentes policiales han indicado que desde entonces se perdió su pista bien porque burlaron la vigilancia, bien porque nunnca llegaron a estar controlados. Fuentes del Ministerio de Interior reconocieron que el Gobierno está "muy preocupado" ante una previsible escalada en las acciones de este grupo. Ayer comenzó la distribución de 30.000 carteles con las fotografías de los seis grapo más buscados, solicitando la colaboración ciudadana.

Expertos en lucha antiterrorista consideran que en la actualidad hay dos comandos de GRAPO, uno de los cuales tiene su base en Madrid y el otro en Valencia y Barcelona. El presunto cerebro de este aparato militar es Pedro Luis Cuadrado Delabat, de 36 años, quien salió de prisión hace unos meses. El lider de GRAPO sigue siendo Manuel Pérez Martínez, el histórico camarada Arenas, que presuntamente actúa desde Francia como ideólogo e impulsor de la organización. Arenas se exilió a París después de abandonar la cárcel de Soria.

Los integrantes de los comandos que están ahora en activo son Laureano Ortega Ortega, de 27 años; Fernando Silva Sande, de 35; Encarnación León Lara, de 31 años; Isabel Santamaría del Pino, de la misma edad que la anterior; María Jesús Romero Vega, de 30 años; Pedro Luis Cuadrado Delabat y un séptimo terrorista que utiliza el nombre de guerra de Jordi, según fuentes de la Seguridad del Estado. Además de éstos, la policía cree que hay otros dos aún no identificados.

Durante los últimos meses han quedado en libertad 18 miembros de GRAPO o del PCE (r), que es el brazo político de la organización terrorista. La policía sospecha que estos individuos han vuelto a integrarse en la organización. "Pero es imposible controlar a estas personas una vez que han quedado libres por orden judicial, tras cumplir condena", según fuentes de Interior. Laureano Ortega Ortega, que utiliza los nombres de Luis y José, ingresó en el GRAPO en 1979. El 23 de enero de 1981 fue detenido en una pensión de la plaza de la Beata Maria Ana de Jesús, en Madrid. Cumplió condena en la cárcel de Soria, de donde salió el 14 de octubre de 1984. Tres meses más tarde fue nuevamente capturado, en la localidad barcelonesa de Badalona, acusado de poseer una metralleta, un rifle y explosivos. De nuevo ingresó en prisión, hasta que el 13 de mayo de 1987 fue puesto en libertad.

Fernando Silva fue condenado a 10 años de prisión por el secuestro del general Villaescusa Quilis y quedó en libertad el 18 de mayo de 1988. Desde entonces se perdió su pista. Encarnación León Lara, conocida como la Rubia, fue detenida por última vez en Sevilla en septiembre de 1984. Isabel Santamaría del Pino, detenida en Madrid en febrero de 1982, salió de la cárcel en diciembre de 1986. María Jesús Romero fue detenida hace un par de años, pero se le perdió el rastro.

Lote de armas

Los GRAPO tienen pistolas y revólveres comprados hace un año en Portugal, además de un arma del calibre 9 parabellum robada al policía Bernardino Ortega, asesinado el año pasado en Madrid. Esta pistola es la utilizada para matar el lunes al agente Juan Sucino en El Prat de Llobregat.Interior considera que los GRAPO preparan "una fuerte ofensiva" contra militares, industriales y policías. Cuentan con más de 150 millones de pesetas, una suma de dinero como nunca tuvo esta organización, procedentes en parte del atraco del Banco Central de Castellón, el pasado julio. La organización se expresa a través del boletín Resistencia, que ha sustituído a la histórica Gaceta Roja.

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