Las comunidades autónomas tendrán folletos turísticos de toda España desde enero

Una discusión con la Administración central sobre si el transporte de los folletos, guías y mapas deben ir a costes pagados o debidos ha provocado que en los dos últimos años la mayor parte de las oficinas de turismo de las comunidades autónomas no haya tenido a disposición del público otro material informativo que el de su territorio. Ahora se anuncia que, a partir de enero, el transporte lo pagará la Administración central.

Turespaña, la empresa estatal encargada de la promoción turística española, sobre todo en el extranjero, asumió la tarea de seguir editando guías y folletos turísticos de toda España para su distribución entre las comunidades autónomas, una vez éstas recibieron las transferencias de las antiguas oficinas de turismo del Estado. Tan sólo las oficinas del País Vasco, Ceuta y Melilla siguen dependiendo directamente de la Secretaría General de Turismo, del Ministerio de Transportes, Turismo y Comunicaciones.De forma periódica, Turespaña (antes Improtur) envía a las oficinas de turismo de las autonomías un boletín de existencias para que pidan a la carta el material que deseen.

El conflicto surgió cuando el primer envío llegó a costes debidos, es decir, que el transporte lo debía pagar el receptor, las oficinas de las autonomías, lo que provocó que éstas rechazaran el material.

Carmen Paulogorrán, de Turespaña, admite que la decisión se tomó para evitar "que despilfarraran material". Paulogorrán admite ahora que las consecuencias han sido muy negativas: se han reducido los pedidos al mínimo o incluso se han suspendido totalmente. A partir de enero los costes de transporte volverá a pagarlos íntegramente la Administración central.

En la oficina de turismo de la Generalitat en Barcelona -en Cataluña existen cinco de estas oficinas, una en cada capital de provincia y la quinta en el aeropuerto de El Prat- contestan a quien pide información turística de otras comunidades que la única solución es escribir a la oficina de la ciudad o región que desee visitar para, a vuelta de correo, recibir la información deseada, y suministran el teléfono y la dirección correspondiente, como pudo comprobar este diario.

En la oficina de turismo de Granada, señalaron que se debía hacer el pedido por escrito. Al preguntar si también le podían proporcionar material de la región contigua de Murcia contestan que no, porque se trataba de otra comunidad.

Viajes complicados

La cuestión puede resultar bastante complicada. Si, por ejemplo, un barcelonés desea hacer un viaje en coche por la cornisa cantábrica y quiere decidir dónde hace un alto en el camino, deberá escribir a las oficinas de turismo de Aragón, Navarra, País Vasco, Cantabria, Asturias y Galicia y, si decide regresar por el interior, al menos a una de las oficinas de Castilla y León.Más difícil lo tiene quien no tiene una decisión tomada y quiere planificar sus vacaciones en España a partir de la información. Debería escribir a 17 direcciones distintas. Por el contrario, si desea viajar a Francia o a Italia dispone en Barcelona de sendas oficinas de turismo de esos países que, gratuitamente, le llenan las manos de folletos, guías básicas y mapas de todo el país.

La otra alternativa es acudir a una librería especializada y comprar una guía (la Guía Azul de España, por ejemplo, cuesta algo más de 7.000 pesetas; la Michelín, 1.350, y la de Campings, que edita Turespaña, unas 400).

Cuatro de las cinco oficinas de turismo de la Generalitat han vuelto a pedir estos días material a Turespaña, una vez que este organismo se ha comprometido a pagar el envío.