Cristiani rechaza el alto el fuego y dice que la ofensiva guerrillera ha sido derrotada

El presidente de El Salvador, Alfredo Cristiani, estaba explicando que la guerrilla había sido derrotada en su ofensiva sobre San Salvador y que rechazaba la última propuesta rebelde ole un alto el fuego cuando el estallido de una bomba cercana lo impulsó de su asiento como un fuelle y, junto al jefe, del Estado Mayor, coronel René Emilio Ponce, y los periodistas que cubrían la conferencia de prensa trató de buscar ayuda en medio de la desorientación general.

El tránsito constante de los helicópteros y de los aviones, y el bombardeo en las proximidades del lugar en el que hablaba el presidente, convirtieron en un episodio grotesco la conferencia en la que las principales autoridades salvadoreñas trataban de demostrar el control que ejercen sobre la situación.Durante más de media hora se siguió escuchando de forma ininterrumpida el lanzamiento de los cohetes, mientras que las bombas hacían retumbar las sillas en las que los periodistas tomaban notas. Cristiani tuvo que levantarse a fumar un cigarrillo y a secarse el sudor; Ponce permaneció sentado con una sonrisa cínica en su rostro. Los corresponsales, alborotados, prestaban más atención a las explosiones cercanas y a los movimientos nerviosos de los guardaespaldas que a las palabras optimistas de los dos dirigentes.

El coronel Ponce se puso inmediatamente, en contacto por radio con su Estado Mayor e informó posteriormente que los combates que imposibilitaban el desarrollo normal de la conferencia eran parte de un ataque del Ejército sobre, posiciones de la guerrilla en las faldas del volcán de San Salvador, a unos pocos kilómetros del centro de la ciudad, donde, según Ponce, la guerrilla trataba de reorganizarse para volver a atacar la capital.

Ponce dijo que el Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN) dispone de importantes depósitos de armas y municiones en las faldas del volcán, adonde los rebeldes huyeron el pasado miércoles después del asalto al hotel Sheraton y de su ataque a los barrios residenciales de San Salvador.

Retroceso

Antes de los bombazos, Cristiani había manifestado que el Gobierno rechaza la última propuesta de diálogo presentada por el FMLN porque ésta supone un retroceso al planteamiento de que en este país existen dos fuerzas armadas. Alfredo Cristiani dijo que la guerrilla "pretende sacar de la derrota de su ofensiva militar el derecho a una territorialidad que río tiene". El presidente manifestó que "es posible retomar el proceso de negociación, pero no que el FMLN siga utilizando el diálogo con fines propagandísticos o tácticos".Cristiani explicó que en estos momentos el Gobierno no puede participar en una negociación sobre un cese del fuego porque el FMLN no ocupa ningún territorio del país ni tiene abierto ningún frente permanente. Dijo que el Gobierno sólo accederá a un diálogo en el que el FMLN acepte un cese total de hostilidades y su incorporación a la vida civil como cualquier otra fuerza política.

El presidente insistió en que éste debía de ser el único tema a tratar en unas eventuales conversaciones de paz. Cristiani aseguró que: si el FMLN no acepta una negociación en esos términos e insiste en la guerra, "las fuerzas armadas pueden resistir militarmente esa agresión".

El presidente precisó que cuando afirmaba que la ofensiva del FMLN había sido derrotada no quería decir que todo el movimiento guerrillero estuviese ya vencido, aunque opinó que éste quedaría reducido en el futuro a la simple actividad terrorista.

Radio Venceremos, emisora del FMLN, aseguró que Cristiani es un "ignorante" por rechazar la propuesta rebelde de paz.