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ETA asesina en el centro de Madrid a un militar y hiere de gravedad a un soldado conductor

La organización terrorista ETA Militar asesinó ayer en Madrid al teniente coronel de¡ Ejército de Tierra José Martínez Moreno, de 51 años, e hirió gravemente al soldado conductor Alfonso de los Reyes Cobertera Zurita, de 20 años, al que le faltaban ocho días para acabar la mil¿ El vehículo en el que viajaban los dos militares, un Opel (Corsa, fue ametrallado por dos individuos desde otro automóvil, un Renault 9, que fue encontrado posteriormente aparcado en un solar de la calle de los Hermanos García Noblejas esquina con la de Alcalá. Los artificieros de la policía hicieron estallar este coche por si escondía una bomba, ante el temor de que la organización terrorista pretendiera cobrarse más víctimas.

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Interior cree que el comando es el mismo que mató a dos mandos en julio

El atentado se produjo minutos antes de las 17.30 en la confluencia de la glorieta de Carlos V con la avenida de la Ciudad de Barcelona, frente a la estación de ferrocarril de Atocha. El vehículo militar, matrícula ET-81707-0, conducido por el soldado Alfonso Cobertera fue ametrallado por los ocupantes de otro turismo, donde viajaban dos miembros de un comando etarra.

Más de una decena de orificios se podían apreciar en el coche de las víctimas; el teniente coronel José Martínez había recibido cuatro proyectiles en la cara. El soldado Cobertera sufrió una herida en sedal, que le atravesó el cuello de oreja a oreja. El ültimo parte médico calificaba 1 as lesiones ¡de Cobertera de "menos graves" y el herido se hallaba consciente. El soldado permanecía anoche internado en el hospital Gregorio Marañón. El alcalde de Madrid, Agustín Rodríguez Sahagún, quien se personó en el lugar del atentado, pidió calma al numeroso grupo de curiosos que se agolpaban en las inmediaciones y que pedían mayor dureza contra, los terroristas.

Testigos presenciales señalaron que el vehículo de las víctimas paró en el semáforo de la confluencia de la glorieta de Carlos V con la. avenida de la Ciudad de Barcelona. El coche de los terroristas estaba esperando, al parecer, en la parada de taxis de la glorieta y se colocó a la altura del automóvil oficial junto al semáforo, momento en que ambos terroristas dispararon contra los militares. Fuentes del Ministerio del Interior señalaron que los terroristas se encontraban en Atocha "a la caza" de cualquier objetivo militar que pasase por la zona.

Fuentes policiales precisaron que un guardia civil de paisano que circulaba en su vehículo a escasos metros por detrás comenzó a perseguir a los etarras, sin lograr alcanzarles.

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Tras la agresión, el soldado saltó del vehículo, mientras el coche seguía moviéndose, ya que llevaba una velocidad puesta. Alfonso Cobertera, con la herida en el cuello, incluso intentó seguir el coche para pararlo, informa José Yoldi.

Los autores del atentado huyeron en un Renault-9 de color blanco, con matrícula falsa 00725-D. La Delegación del Gobierno en Madrid ordenó el cierre de las carreteras de salida de la ciudad mediante la Operación Jaula, que se extendió casi dos horas.

El teniente coronel Martínez, que estaba soltero, se dirigía a su domicilio tras haber terminado su jornada laboral en el Cuartel General del Ejército de Tierra, donde estaba adscrito a la inspección de Artillería.

El Renault-9 utilizado en el atentado había sido robado en San Sebastián el pasado mes de octubre y el Ministerio del Interior albergaba la firme sospecha de que había sido trasladado a Madrid por ETA Militar para utilizarlo en una acción terrorista. Por tal motivo, Interior había alertado a todos sus servicios de la existencia de dicho vehículo. La matrícula verdadera del R-9 es SS-7323-Y; el color original del coche era gris metalizado y había sido repintado de blanco. Este vehículo fue encontrado horas después del atentado en la confluencia de las calles de los Hermanos García Noblejas y de Alcalá y explosionado por la policía, que no encontró bomba alguna.

El atentado de ayer se produjo a unos 200 metros del lugar donde el pasado 19 de julio fueron asesinados el coronel José María Martín Posadillo y el comandante Ignacio Baragua Arbués. ETA se atribuyó aquel atentado.

Un total de 27 militares han sido asesinados en Madrid desde que el 20 de dicierribre de 1973 ETA matase al vicepresidente de Gobierno, almirante Luis Carrero Blanco. De ellos, ETA ha asesinado a 2.3 y los GRAPO, a 3.

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