Millares de personas se manifiestan en Leipzig contra el régimen de la RDA
La manifestación más numerosa de los últimos años contra el régimen de la República Democrática Alemana se desarrolló el pasado lunes por la noche en la ciudad de Leipzig. Cerca de 8.000 personas, según los grupos de oposición, se dirigieron desde la catedral de San Nicolás hasta la estación central de la ciudad.
La marcha se inició al finalizar la ya tradicional "oración por la paz" que se celebra cada semana en esta catedral, en cuyo interior había unas 2.000 personas. En el exterior de la catedral esperaban otros miles que al finalizar los rezos se sumaron a los que salían de la iglesia. La policía efectuó numerosas detenciones, si bien ayer la agencia oficial de la RDA negaba que hubiera ningún detenido.Previamente, la policía había cerrado la ciudad impidiendo la entrada de cualquier periodista extranjero. Concretamente, a la televisión de la RFA, que pretendía llegar a Leipzig le fue prohibido acercarse a la ciudad. Según portavoces de los manifestantes la. concentración tenía por objeto protestar contra el uso de la violencia por el Estado y exigir la libertad de opinión y de reunión en el, país.
La manifestación del lunes se produce en el contexto de una actividad cada vez más abierta de los grupos de oposición, como la reunión que tuvo lugar el domingo en la que el recien creado Nuevo Foro, asumió el papel de coordinador de la oposición.
Las autoridades suavizaron ayer su actitud con respecto a ese grupo opositor al que previamente habían calificado de "enemigo del Estado", indicando que la razón de la negativa a su solicitud de legalización era debida a que Nuevo Foro "no era necesario para la sociedad", si bien, por otra parte, el ministerio del Interior advertía personalmente a dos de las firmantes del documento de inscripción legal, Barbel Bohley y Jutta Seidel, que abandonaran inmediatamente esas actividades.
La gestación de esta todavía tierna oposición organizada al régimen, está pasando por sus primeros problemas de crecimiento, y ayer sus dirigentes mostraban las primeras fisuras en su seno.
Por otra parte, la situación en las embajadas de Bonn en Praga y Varsovia, donde se encontraban encerrados, respectivamente, 1.100 y 400 alemanes orientales que quieren trasladarse a la RFA, parecía ayer por la tarde a punto de solucionarse. El abogado de la RDA Wolfgang Vogel, especialista en el problema de los refugiados, llegó ayer a Praga con una nueva oferta. Según fuentes de los refugiados, Vogel les prometió que aquellos que acepten volver a sus casas obtendrán antes de seis meses el permiso legal para emigrar.
Cinco autobuses esperaban en la puerta de la embajada, sin embargo sólo 100 personas habían aceptado la oferta a última hora de la tarde de ayer.
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