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Sean Scully: "Busco la emoción, no el sentimentalismo"

El pintor expone su obra en el Palacio de Velázquez

Sean Scully (1945) nació en Irlanda, pero ahora es ciudadano norteamericano. Es abstracto y trabaja por lo general en grandes superficies con planos de color y líneas. Su trabajo como pintor es, "insistente", como él mismo dice, y eso da cierto sentido moral a su obra. "Busco la emoción, no el sentimentalismo", afirma Scully, que define su obra como el final de una línea imaginaria entre Van Gogh, Mondrian, Jasper Johns y Rothko. Desde hoy se puede ver en el Palacio de Velázquez, en el Retiro, una veintena de pinturas, además de dibujos y obra gráfica.

Hay dos puntos en los que Sean Scully parece insistir en su investigación como pintor: la búsqueda del color y el lenguaje abstracto, geométrico. "No creo que sea exacto decir que yo investigo, tal vez debería hacerlo. Y hay una gran diferencia entre un artista y un científico. El artista hace juicios morales que el científico no hace. El científico investiga y el artista sólo insiste. Y yo diría que mi trabajo es extremadamente insistente".Considera que trabajar la expresión en un sobrio lenguaje geométrico es más subversivo que hacerlo a través de la figura. "Pienso que es muy importante hacer una arte humanista a partir de un lenguaje aparentemente inhumano como el geométrico. Es más importante hacer eso, y es más subversivo, que hacer un tipo de pintura expresionista, que sería lo obvio. Son más sofisticadas que simplemente plantarse delante de un lienzo y sacar inopinadamente cualquier reacción del momento".

Es la diferencia entre una reacción brutal y la ira."Sí, exactamente, porque yo pienso que soy una persona con una profunda rabia". Nació en Irlanda, vivió en Londres desde pequeño, se trasladó a Estados Unidos, y tal vez haya sido siempre un extranjero. "Creo que mi ira viene del desarraigo", afirma Scully.

Tras un recorrido por la exposición de sus obra expuesta en el palacio de Velázquez, parecen surgir dos nombres: Jasper Johns y Mark Rothko. "Creo que ellos dos son los dos mayores artistas norteamericanos. Y otro de los pintores que considero presente en mi pintura es Mondrian. Johns es tan importante porque utilizó temas que eran triviales y los conectó con la tradición del gran arte, y logró cosas hermosas. Yo trato de hacer algo similar; la diferencia, claro, es que mi trabajo es totalmente abstracto. Pero también hay similitudes. Si trazas una línea desde Van Gogh, Mondrian, Rothko y Johns, hallas mi trabajo. Es muy simple".

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