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"La discriminación debe ser eliminada", dice De Klerk en su último acto electoral

El presidente interino de Suráfrica, Frederik De Klerk declaró ayer en Johanesburgo que el "la discriminación debe ser eliminada", e invitó a todos los surafricanos a participar en su Gobierno, como única solución a los problemas de su país. De Klerk hizo estas declaraciones en el último mitin anterior a las elecciones legislativas que celebra Suráfrica mañana y en las que no participan los negros. Es el cierre de una campaña electoral marcada por la represión violenta, por parte de las fuerzas, de seguridad, de los actos de protesta contra el régimen. La policía, mientras tanto, detuvo e interrogó ayer al arzobispo anglicano y premio Nobel de la Paz Desmond Tutu.

"La discriminación debe ser eliminada. No hay otra alternativa", afirmó el presidente interino de Suráfrica durante su último mitin. En él declaró De Klerk que su partido invita a todos los surafricanos a participar en el Gobierno y a disfrutar de igualdad de oportunidades. "La dominación, bajo cualquier forma que sea, es injusta", añadió. Los ciudadanos surafricanos convocados a votar en las elecciones de mañana son los blancos, indios y mestizos. Los negros, que constítuyen el 73% de la población, están excluidos de la convocatoria.

Cinco arrestados

También ayer, sin embargo, fueron detenidos e interrogados varios líderes anti apartheid. El premio Nobel de la Paz Desmond Tutu fue detenido por segunda vez en una semana y puesto en libertad después de una hora de interrogatorio en Ciudad del Cabo. Además de él, John Allen, su secretario, Colin Jones, decano de la Iglesia anglicana, y el pastor Lionel Louw fueron igualmente interrogados y puestos después en libertad. A primera hora de esta mañana aún faltaba por liberar el quinto detenido, el pastor Boesak.La violenta campaña electoral se cobró el domingo la primera víctima entre los blancos surafricanos. Un estudiante murió en un hospital de Ciudad de El Cabo, después de haber sido atacado con piedras mientras viajaba en su vehículo. Otro blanco fue gravemente herido en otro incidente.

Entre las fuerzas antiapartheid que más ha combatido durante la campaña electoral el régimen segregacionista de Suráfrica está el Movimiento Democrático de Masas (MDM), acusado por el Gobierno de ser el frente dentro del país del Congreso Nacional Africano (ANC). Uno de los tres partidos políticos que van a disputar las elecciones generales para blancos el 6 de septiembre, el Partido Demócrata (PD), apoya abiertamente el derecho del MDM a existir.

En julio empezó una campaña a nivel nacional de provocación, liderada por e1 MDM con el Congreso de los Sindicatos Surafricanos (Cosatu), un grupo colectivo para los trabajadores negros, y el Frente Democrático Unido (UDF), que ha sido práctícamente amordazado por las medidas de emergencia.La campaña consistió en desobediencia civil, cuyo propósito era contradecir los pronunciamientos del Gobierno, especialmente del nuevo presidente, Frederik W. de Klerk, de que el apartheid no era apoyado por su Partido Nacional.Hospitales para blancos

Los activistas organizarbri a la población negra para que fuera a tratarse a los hospitales para blancos, que viajara en autobuses para blancos y que hiciera pic-nie en las playas para blancos.

La campaña de provocación se expresó con elocuencia: aunque los médicos y las enfermeras atendieron a los pacientes negros sin protestar, los autobuses en Pretoria (otras de las ciudades principales tienen un sistema de transporte mixto) rehusaron parar cuando había negros en la cola. En la provincia de El Cabo, un gran desplazamiento policía¡, con perros y látigos, protegió las playas blancas de los bañistas negros. Las acciones continuaron: las organizaciones prohibidas o silenciadas por las leyes de emergencia se desprohibieron y volvieron a sus actividades. El fin de semana pasado, unas 5.000 personas de raza negra se manifestaron en las playas segregadas de la zona turística de Durban.

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