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Tiroteo indiscriminado en el aeropuerto de Medellín

Antonio Caño

ENVIADO ESPECIAL, Dos personas murieron ayer en el aeropuerto de Medellín en un atentado perpetrado por presuntos sicarios de narcotraricantes en vísperas de la primera extradición de unimportante capo a Estados Unidos. La guerra entre la mafia de las drogas y el Estado colombiano se recrudece mientras llegan al país los primeros suministros de la ayuda militar concedida por la Administraciónnorteamericana. El atentado, cometido con ráfagas indiscriminadas de ametralladora, se cobró la vida de uno de los pasajeros que esperaban su vuelo y de uno de los integrantes del comando que llevó a cabo el ataque.

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El resultado pudo haber sido mucho peor, de acuerdo con las características del ataque. Poco después de las seis de la mañana, hora en la que acaba el toque de queda decretado la pasada semana por las autoridades en la segunda ciudad de Colombia, dos individuos vestidos con ropa militar abrieron fuego a discreción contra la fila de 30 o 40 pasajeros que a esa hora esperaban sus vuelos para Bogotá y Miami. Las ráfagas de ametralladora duraron varios minutos, tras los cuales más de una decena de personas quedaron tendidas en el suelo de la terminal aérea de Medellín con heridas de diversa gravedad.En un primer mornento se temió que se hubiera producído una verdadera matanza, pero partes policiales informaron posteriormente que la mayoría de los heridos, entre ellos tres policías, presentaban heridas en las piernas. La información oficial descartó también la hipótesis de que el ataque hubiera sido lanzado contra algun personaje público de los que a esas horas de la mañana suelen volar entre Medellín y Bogotá.

[Pocas horas más tarde, se descubrió una bomba en la carcasa de un avión de la compañía aérea colombiana Avianca que trasladaba a 180 pasajeros de Pereira (oeste de Colombia) a Medellín. La bomba fue desarticulada en el aeropuerto de José María Córdoba de Rionegro, a 40 kilómetros al noroeste de Medellín, informa France Press].

La noticia de que el atentado había sido indiscriminado hizo que cundiera el pánico entre una población ya atormentada por la violencia desatada en esta guerra sin cuartel. El domingo, una bomba de pequeña intensidad hizo explosión en el jardín del hotel Intercontinental de Medellín, donde habitualmente se albergan los periodistas que visitan aquella ciudad. También se han producido amenazas contra el hotel que la Prensa ocupa en Bogotá.

Explosión de un avión

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En el parte de atentados diarios desde que el presidente Virgilio Barco decidió hacer frente a las organizaciones de narcotraficantes destaca la explosión en el interior del país de un avión de transporte supuestamente utilizado por la agencia norteamericana contra las drogas (DEA). Precisamente dos aviones Hércules de Estados Unidos llegaron el domingo a Colombia como anticipo de un envío de apoyo norteamericano de¡ que también formarán parte aviones ligeros, helicópteros y carros de combate por un total de 65 millones de dólares (7.800 millones de pesetas).Los expertos pronostican un incremento de la violencia si el Gobierno ratifica esta tarde, la extradición del capo Eduardo Martínez Romero, presunto jefe de las finanzas del cártel de Medellin, quien sería el primero de los entregados a la justicia norteamericana desde el comienzo de esta guerra. La decisión final sobre esta extradición debe ser firmada esta tarde por el presidente y los seis ministros que integran el Consejo Nacional contra el narcotráfico. Si el Gobierno hace hoy efectiva la extradición, como se espera, la reacción de las bandas de narcotraficantes, que temen esa medida más que ninguna otra, puede ser espectacular.

Mientras, se ha reducido la agresividad de las principales guerrillas, que ayer iniciaron un diálogo de paz exploratorio con representantes del Gobierno en una base de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).

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