La cerveza seca llega a España

La cerveza seca, una bebida alcohólica que reseca la garganta y no llena el estómago, ideal para quienes desean guardar la línea, acaba de introducirse en España. Los cerveceros norteamericanos han tardado dos años en reconocer su derrota, pero al final han dado la razón a su gran rival comercial: Japón. En 1987, los japoneses lanzaron la cerveza seca y luego la introdujeron en Estados Unidos con gran éxito. Hoy la producen más de 19 cerveceros norteamericanos y europeos.

Los españoles pueden conocer, desde hace un mes, el sabor de un nuevo tipo cerveza, la dry, que ha conmocionado el mercado tradicional, y que al decir de los adictos resulta perfecta para combatir el calor, porque su consumo no provoca la sensación de pesadez de las cervezas clásicas.La cerveza seca (dry beer, como se la conoce en EE UU) se creó en Japón y se lanzó en aquel país en marzo de 1987. Sus inventores fueron los cerveceros de la Asahi; su producto, la Asahi Super Dry, fue un éxito, ya que en pocos meses alcanzó el 20% del mercado japonés. La nueva cerveza fue desarrollada también con mucho acierto por los otros cerveceros japoneses -Kirin Brewery, Sapporo Breweries y Suntory International-. En pocos meses la cerveza seca comenzó a cambiar el gusto de los japoneses y hoy el 40% de la cerveza que se consume allí es seca.

Los cerveceros japoneses comprendieron de inmediato que su mercado natural era Estados Unidos, donde la obsesión por la pérdida de peso y la línea había provocado el lanzamiento de la cerveza ligera -light o diet- a mediados de los ochenta. Los japoneses contaron con una gran plataforma para introducir su cerveza, los restaurantes de sushi, el pescado crudo que enloquece a los norteamericanos. Fue allí donde los potenciales consumidores conocieron el nuevo producto y donde surgió su necesidad de incluir esas cervezas en sus compras o en las barbacoas de los fines de semana.

En 1988, los norteamericanos comenzaron a comprar esa cerveza en las tiendas de licores y en los supermercados, mientras los especialistas cerveceros de las grandes compañías de EE UU intentaban dar con la fórmula que les permitiera competir con los japoneses en su propio terreno.

A principios de este año el boom de la cerveza seca ha estallado en el mercado estadounidense. Anheuser-Busch, la mayor cervecera del mundo introdujo Michelob Dry. El éxito no se ha hecho esperar y la Busch lanzará dentro de unas semanas su famosa Budweiser con sabor seco, la Bud Dry. De momento las pruebas de consumo que se han realizado en Tejas, Oregón y en algunos puntos de California y Minnesota han sido positivas.

La cerveza seca es un producto más de mercadotecnia que de elaboración científica, y como tal comienza a analizarse. Representa en estos momentos el 1 % del mercado cervecero norteamericano, y eso no es decir poco, porque el volumen de ese sector alcanza los 38.700 millones de dólares anuales.

Canadienses y australianos desarrollan también cervezas secas. La Molson Dry Beer, canadiense, se comercializa en EE UU con gran éxito, y lo mismo ocurre con otras marcas, que con el calor sofocante están sometidas a un severo análisis por los especialistas de todo el país con la excusa de combatir esas altas temperaturas. En España ha sido la compañía Heineken la que ha introducido ya la Dry 100.

Más ligera

Según esos especialistas, la cerveza seca es mucho más ligera incluso que las cervezas más light del mercado, como la Coors Light o la popular Bud Light.

La cerveza seca tiene un 4,5% de alcohol frente al 5% de las cervezas convencionales y es algo más carbónica, aunque lo cierto es que después de ingerir un trago la garganta se seca por completo y el consumidor siente como si no hubiera bebido nada.

Según las listas de preferencias la Sapporo Dry Draft -cerveza seca de barril japonesa- es la mejor dry del mercado. La cerveza alemana Holsten Dry, la Esquire Extra Dry (EE UU) y la holandesa Grolsch Premium Dry le siguen en la lista.