Los científicos que siguen la odisea de la 'Voyager 2', felices y deslumbrados

TASIO CAMIÑAS Los técnicos que siguen desde Pasadena (California, EE UU), Canberra (Australia) y Robledo de Chavela (Madrid) las evoluciones de la sonda espacial norteamericana Voyager 2 están deslumbrados ante la gran cantidad de datos y fotografías sorprendestes que está enviando. La pasada madrugada la sonda se aproximó a 5.000 kilómetros de la atmósfera de Nejptuno y tenía previsto fotografiar al enigmático Tritón.

En la conferencia de Prensa que ofrecieron los técnicos del Jet Propulsion Laboratory de Pasadena, a las 10. 15 de ayer (las 19.15, hora peninsular española), la mayor atención se centró en las últimas fotografias de Tritón enviadas a la Tierra por la sonda Voyager 2. A las 11.20 horas de la mañana de ayer en la península la sonda estadounidense pasó a unos 38.000 kilómetros de Tritón, el punto más cercano previsto.Las fotografías que está enviando la nave espacial son espectaculares. En ellas pueden verse formaciones geológicas similares a grandes desfiladeros y a planicies en medio de una superficie volcánica. Los científicos norteamericanos aún no se atreven a pronunciarse sobre estas formaciones y su posible contenido, pero no se descarta que en ellas pudiera haber algún fluído o restos de lava volcánica. La fotografía más curiosa mostraba unas ex trañas manchas oscuras bor deadas de una zona blanca que, se cree, pudiera ser escarcha o hielo.

Mediante el procesado elec trónico de estas instantáneas se podrá lograr una resolución de las mismas de hasta tres kilómetros sobre la superficie real de Tritón, según los técnicos de la estación de Robledo de Chavela, que recibieron en directo la conferencia de prensa desde Pasadena. La calidad fotográfica que están obtenien do las camaras del Voyager 2 supone un gran éxito técnico ya que la velocidad de la sonda y la escasa luminosidad del en torno hacen que las exposiciones sean a veces de varios minutos.

Antes de aproximarse a Tri tón, la sonda espacial pasó cerca del polo norte de Neptuno y debido a la gran atracción de este planeta alcanzó una velocidad de 120.000 kilómetros por hora. La Voyager 2 ha ten¡ do que soportar una fuerte radiación en este punto, pero apenas se han perturbado sus ordenadores. Los aparatos científicos de la nave han captado vientos en la atmósfera de Neptuno de hasta 600 kilómetros por hora y las señales radioeléctricas han mostrado que este planeta gira sobre su eje una vez cada 16 horas.

La sonda Voyager 2 ha tomado datos sobre la composición de la atmósfera de metano de este gran planeta azul y gris y sobre su radiación cósmica. Muchos de los datos que está enviando la sonda tardarán más de cuatro años en ser procesados y estudiados, pero los técnicos estadounidenses ya están configurando un mapa térmico de Neptuno. También ha llamado la atención el supuesto campo magnético que rodea a este planeta, y que puede aportar nuevos datos sobre la órbita de Neptuno y su fuente de calor interna.

El director de la estación de Robledo de Chavela, Luis Ruiz de Gopegui, precisó que los últimos datos enviados por la sonda confirman la existencia de, al menos, un anillo completo alrededor de Neptuno, y posiblemente dos.