Detenidos los 'atracadores del puente aéreo'

José Romero Sánchez, de 39 años, y Julio Pérez de Miguel, de 37, han sido detenidos en Madrid y Barcelona, respectivamente, acusados de ser los autores de 15 atracos cometidos en otras tantas sucursales bancarias, en las que consiguieron un botín total de unos 50 millones de pesetas. Los detenidos, que utilizaban una empresa inmobiliaria para blanquear el dinero, llegaron a atracar dos entidades en días consecutivos, una en cada ciudad, para lo que se servían del puente aéreo.

El primero de los atracos que se imputan a los detenidos ocurrió el pasado 15 de marzo, en Madrid, en una agencia del Banco Exterior de España, en la calle de Guzmán el Bueno, de donde se llevaron 2.500.000 pesetas. El último, en una sucursal de Banca catalana, en Barcelona, el pasado 11 de Julio. El día anterior, 10 de julio, hubo un atraco frustrado en una agencia del Banco Urquijo, en Madrid. En estos meses se sucedieron los robos, hasta totalizar 15 atracos, en oficinas de la Caja Postal de Ahorros, Banco Central y la Caixa de Pensions, entre otros.La forma de operar era siempre la misma. Dos hombres armados con pistolas que parecían auténticas sorprendían a los empleados que llegaban a primera hora de la mañana, e iban esperando la llegada de los demás. Tras maniatar y encerrar a todos en alguna dependencia, bajo amenazas de muerte, abrían o esperaban la apertura de la caja fuerte y se apoderaban del contenido de la misma.

Inspectores de la sección antiatracos de la brigada provincial de Policia Judicial de Madrid pudieron identificar a José Romero como uno de los presuntos atracadores, y después a Julio Pérez, en colaboración con la policía de Barcelona. Ya existían indicios relativos a que ambos actuaban conjuntamente en los atracos y se desplazaban de una ciudad a otra por el puente aéreo.

Al mismo tiempo, la sección antiatracos de la Brigada de Policía Judicial de Barcelona dispuso un servicio de vigilancia en torno a la vivienda de Julio Pérez, en la calle de Lepanto, y en las oficinas de una inmobiliaria, situada en la

Gran Vía de Carlos III. Finalmente, el sospechoso fue detenido el lunes, 17 de julio, cuando regresaba de otra residencia que poseía en la playa de la localidad de Tordera.

Fuentes de la Jefatura Superior de Madrid informaron que la inmobiliaria en cuestión no tenía actividad comercial. Era una empresa fantasma, montada presumiblemente como tapadera para blanquear el dinero procedente de los robos.

A los detenidos se les ocupó, siete cuadros de Picasso, Guinovart y Dalí, ocho esculturas en bronce, también de Dalí, treinta millones de pesetas en pagarés y cuentas corrientes, una cuenta bancaria en Ginebra, un yate atracado en el puerto de Blanes, en Gerona, dos coches, de las marcas Porsche y Alfa Romeo, una moto Yamaha, tres pistolas de imitación y otros efectos.