El presunto autor del 'crimen de Maials' niega ante el juez que matara a un amigo de ocho años

Francesc Xavier Jové Mora, de 19 años, negó ayer ante el juez que matara a su amigo Josep Ramon Florensa Mateu, de ocho años, durante la noche del 10 de febrero de 1988, en la localidad leridana de Maials. El fiscal solicita 11 años de prisión para Jové por un presunto delito de homicidio y la acusación particular pide 30 años de cárcel por asesinato y seis más por abusos deshonestos. La defensa pide la absolución.

Jové fue detenido cinco días después de que fuera descubierto el cadáver de Josep Ramon Florensa en el interior de un pozo de una masía situada en las afueras de Maials, localidad de 1.200 habitantes. El cuerpo sin vida de Florensa, que tenía los pantalones bajados, presentaba signos de haber sido golpeado. La detención de Jové se produjo a raíz de la declaración efectuada por algunos testigos del pueblo que vieron al procesado con la víctima antes de su desaparición.El procesado, que tenía 17 años cuando ocurrieron los hechos, confesó la autoría del conocido como crimen de MaiaIs después de haber prestado declaración en dos ocasiones en el cuartel de la Guardia Civil. Durante la primera jornada del juicio, Jové negó con monosílabos, y en todo momento, la autoría del crimen. Cuando ocurrieron los hechos Jové, según manifestó en la Audiencia de Lérida, estuvo viendo junto con sus padres por televisión la película El emperador del norte.

"La Guardia Civil decía que me había visto [con Florensa], y yo decía que no, pero ellos que sí", manifestó a preguntas realizadas por el fiscal relacionadas con su autoinculpación. El procesado justificó su declaración ante la Guardia Civil añadiendo: "Me dijeron que si decía que había sido yo, podría irme a casa". "¿Y usted se creyó eso?", inquirió el fiscal. "Claro", contestó él.

A preguntas de la acusación particular, el procesado reconoció que había acompañado a su amigo hasta la masía donde fue descubierto el cadáver. Jové también reconoció durante la vista que se inventó una historia de unos encapuchados, a quienes acusó del asesinato, aconsejado por un compañero de celda.

Posible sodomización

Seguidamente prestó declaración el médico Lluís Fontvellida, que practicó la autopsia al cadáver de Josep Ramon Florensa. Fontvellida manifestó que la víctima presentaba un ano anormalmente dilatado y no descartó la posibilidad de que hubiera sido sodomizado en múltiples ocasiones. Asimismo, consideró al procesado como un débil mental con trastornos atípicos de la personalidad. A continuación, varios psicólogos y psiquiatras que han examinado a Jové coincidieron en afirmar que el procesado sufre trastornos mentales que disminuyen parcialmente el control de su voluntad y de su conocimiento.

La primera jornada de la vista, que se prolongará hoy y en la que serán citadas unas 50 personas entre testigos y peritos, congregó en la sala de la Audiencia de Lérida a numerosos vecinos de Maials, que murmuraron cuando el abogado defensor del procesado enunciaba algún elemento exculpatorio de Jové. En un extremo de la antesala que comunica con el lugar donde se celebró la vista, los padres de Jové, alejados del resto de los vecinos de Maials, aguardaron su comparecencia ante el tribunal. Los vecinos del pueblo arroparon con su presencia a la madre de Josep Florensa.