La Generalitat reformará el derecho civil catalán para proteger a las mujeres separadas

La Generalitat reformará el derecho civil catalán para equiparar los derechos de la mujer a los del hombre cuando un matrimonio decida separarse, según explicó ayer la directora de la Comisión Interdepartamental de la Mujer de la Generalitat, Joaquina Alemany.

La modificación del derecho civil catalán se centra, principalmente, en añadir al actual régimen de separación de bienes vigente en Cataluña una cláusula que incluya también la participación de los dos cónyuges en las ganancias habidas durante el tiempo que ha durado el matrimonio. Esta reforma, cuya aprobación se propondrá al Parlament, está destinada a que ningún miembro de la pareja sufra discriminación alguna en caso de disolución. Esta circunstancia, que suele afectar especialmente a las mujeres, implicará que la pareja podrá repartirse equitativamente los bienes adquiridos durante el matrimonio.El Gobierno de la Generalitat ha decidido, en este contexto, encargar los estudios necesarios para introducir en el Derecho Civil catalán una normativa que proteja los derechos del cónyuge no titular sobre la vivienda que había ocupado con su pareja hasta el momento de la separación, atendiendo las obligaciones familiares de cada uno y su situación patrimonial.

Bienes gananciales

Los matrimonios se rigen en Cataluña por el régimen de separación de bienes, consistente en que cada uno de los cónyuges es dueño de las propiedades que tiene a su nombre, independientemente de que hayan sido obtenidas antes o después del matrimonio, mientras que en el resto del Estado impera el régimen de bienes gananciales, basado en que los dos miembros de la pareja son co-propietarios de las pertenencias que aporten ambos.El Gobierno catalán presentará al Parlament una iniciativa para que la Cámara catalana proponga al Congreso de Diputados la supresión de la presión fiscal sobre las pensiones alimenticias, además de penalizar las agresiones sexuales. Estas medidas están recogidas en el plan de actuación del Consell Executiu de la Generalitat para la oportunidad de igualdad de las mujeres. Su objetivo, según explicó ayer la directora de la Comisión Interdepartamental de la Mujer, Joaquina Alemany, es crear un marco adecuado para eliminar las discriminaciones que sufren las mujeres en los ámbitos políticos, económicos y sociales.

El programa, inspirado en la directiva de la CE sobre la igualad en el trato, afectará a todos os departamentos de la Generalitat y será dirigido a través de un instituto de nueva creación que que dispondrá inicialmente de unos 50 millones de pesetas.

El plan se divide en seis bloques: complementar la equiparación legal entre hombres y mujeres; impulsar medidas de protección para las mujeres en situación límite; proteger la familia íntegramente y la maternidad; educar en la igualdad; incentivar el reconocimiento social de los valores igualitarios, así como fomentar la participación de las mujeres en la vida social. También se impulsarán medidas sanitarias relativas a la prostitución.

El paquete de medidas en torno al mundo laboral contempla incrementar las inspecciones en las empresas para reducir la discriminación salarial o el acoso sexual que sufren las mujeres en sus puestos de trabajo, además de buscar fórmulas que atajen el creciente rechazo de las empresas a la contratación de mujeres, para evitar conceder la baja maternal. El ámbito de la educación también se verá afectado al proyectarse impartir clases de hogar para alumnos de ambos sexos, para que "los niños aprendan a coser, cocinar y limpiar si es necesario y no estén discriminados como antes", según anunció Joaquima Alemany.